La fecha finalmente llegó y The Weeknd, la gran estrella canadiense, cumplió la promesa de brindar un show único en su tipo ante un Estadio AKRON abarrotado en Guadalajara, en donde el productor y compositor, dio cierre a su gira After Hours Til Dawn Tour en Latinoamérica.
Tras el recorrido que The Weeknd hizo por México, aterrizando previamente en Ciudad de México y Monterrey, el cantante tuvo su encuentro ante 60 mil fanáticos en Guadalajara, con un show que maravilló por su gran despliegue de producción tecnológica y escénica.
En su debut por tierras tapatías, el multipremiado artista, demostró por qué es uno de los exponentes más importantes de la industria. Poco a poco, The Weeknd reveló su repertorio musical con los éxitos que lo han colocado en el top de las principales plataformas sonoras del mundo.
Fotografías: Players of Life Guadalajara – Servando Gómez
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El #1 seduce a Guadalajara: The Weeknd cautiva con una velada de emociones en el Estadio AKRON
El ambiente futurista no se hizo esperar y desde los primeros segundos de la velada, The Weeknd dejó en claro el gran nivel de producción que lo ha posicionado como uno de los mejores shows de la actualidad.
Desde cualquier localidad en el Estadio AKRON, los tapatíos fueron testigos de la gran presencia y control del cantante sobre la tarima. Acompañado por bailarines y músicos, The Weeknd mostró su versión más vanguardista con la indumentaria que lució.
En el top mundial: en plataformas como Spotify, The Weeknd está posicionado en lugar número 1 de artistas más escuchados, sumando a la fecha más de 104 millones 729 mil oyentes mensuales.
Poco después de las 21:00 horas, el show dio sus primeros pasos con éxitos como “False alarm”, “Sacrifice” y “Often”.
Aunque durante la primera parte del show el cantante mantuvo en resguardo su rostro con la máscara futurista que portó, finalmente reveló su cara incrementando la euforia de los tapatíos que, por diversos momentos de la velada, acompañaron al cantante no solo con gritos y aplausos, también iluminando al estadio con destellos desde la cancha y las butacas.
Así comenzaron a sonar otros esperados temas como “Circus maximus” y “After hours”. Por su puesto, el público aguardaba por canciones ya icónicas como “Blinding lights”.
