En entrevista para PLAYERS of Life, platicamos con Nayeli Solorio Cortés, una fotógrafa lagunera que ha dejado su huella en el mundo de la fotografía gracias a su trabajo en eventos musicales y su liderazgo en la casa creativa “Casa Andé”.
Nayeli es una profesional graduada de comunicación y periodismo en la UAL, quien se define como una persona extrovertida, equilibrada y amable. A lo largo de su carrera, ha tenido la oportunidad de fotografiar a grandes artistas como Caloncho, Pahua, Ximena Sariñana y Bandalos Chinos, entre otros, en conciertos y festivales.
Además, junto a su hermano, dirige la mencionada casa creativa “Casa Andé”, que ofrece un concepto innovador para la fotografía social y comercial.
En entrevista, descubriremos más sobre la trayectoria y visión de Nayeli en el mundo de la fotografía, en redes sociales se llama POP.SUCKS
La fotografía como vocación
Según nos cuenta Nayeli, su curiosidad por la fotografía surgió mientras estudiaba en la universidad, donde descubrió su talento en esta área y se dio cuenta de que era algo que realmente la apasionaba.
Desde entonces, nunca ha dejado de explorar y experimentar en el mundo de la fotografía, encontrando en esta disciplina una fuente constante de motivación y satisfacción personal.
“Nunca me di cuenta de que era buena en esto, ni tampoco se me cruzó por la mente dedicarme a la fotografía hasta que comencé a estudiar”.
“Desde la universidad surge en mí la curiosidad de la fotografía. Me di cuenta de que era buena y desde ahí empecé. Realmente nunca había encontrado algo que me llenara tanto”.
“Te das cuenta de que algo es tu pasión porque lo sientes en el corazón, es algo que te llena cuando lo haces. Y que a pesar de que hay un estrés y cansancio, se siente una felicidad que contrarresta todo”.
“Para mí la fotografía es la vida convertida en arte”.
La música + Fotografía, un lenguaje natural para Nayeli Solorio
“Ahorita lo que más me gusta es capturar conciertos, es algo que me llena mucho y disfruto muchísimo”, comparte Nayeli Solorio que ha trabajado con bandas como Caloncho, Alemán, Little Jesus, Banda los Chinos y recientemente con Ximena Sariñana en Pal Norte.
¿Cómo has logrado tu acercamiento con grandes artistas?
“Todo radica en lanzar la piedra. La mayoría de la gente tiene miedo de intentar contactar a grandes artistas o bandas porque tienen en la mente que algo es complejo, y probablemente si lo es pero hay que intentarlo”.
“A mí lo que me ha ayudado muchísimo es que Caloncho, en su momento, me dio la oportunidad de hacerle fotos, cree un concepto para él, le gustó y desde ese momento se me abrieron muchas puertas porque es una gran carta de presentación”.
¿Cómo lograste confiar en ti misma como fotógrafa?
“Esa seguridad es lo más difícil de encontrar, logré creer en mí justamente después de estar un trabajo en el que no me iba nada bien, tanto en el tema emocional como profesional”, comparte Nayeli Solorio.
“En ese entonces me repetían constantemente que no era buena en mi trabajo y fue a partir de ahí que decidí ponerme a prueba y decir: Considero que mi trabajo es bueno y debo confiar en eso”.
“También me llené muchísimo de consejos de amigos que ya estaban en el medio y justamente me repetían el mismo consejo: Si tú no confías en ti, nadie lo hará. Tienes que empezar a hacerlo tú primero”.
Dominar los nervios para captar momentos únicos
“La parte más complicada de todo esto es dominar mis nervios, creo que el estar en backstage y ver a tantas personas afuera impone muchísimo, porque internamente sé que el artista espera que yo saque lo mejor de este ambiente que se está armando“.
“Al final esto es una presión que nadie te la dice, no está como tal verbalizada pero se siente la gran responsabilidad interiorizada. Siento muchos nervios antes de cualquier concierto”.
“Lo importante es aprender a dominar esos nervios porque de eso depende de que saque una buena foto o esté atenta de captar los momentos más relevantes no solo en lo emocional, si no en la cuestión técnica de la cámara”.
“Con Bandalos hay una foto icónica que me gusta mucho de Matty donde está volteando hacia mi y en ese momento no estaba mi cámara preparada pero cuando sucedió eso, simplemente di click“.
“El verdadero reto es que tu cerebro trabaje al cien para captar momentos que pasan en cuestión de segundos, y que no vuelven”.
Andé Casa Creativa
“Se trata de un proyecto que surge con mi hermano, como una propuesta diferente en el ámbito profesional de la fotografía, para brindar un concepto más artístico a las personas”.
“Considero que lo comercial-social en cuanto a la fotografía se presta a la misma propuesta de siempre y a mí me gusta retratar a todas las personas como si estuviera retratando a un artista, ahí sucede la magia”.
Tres cosas que no le pueden faltar a un buen fotógrafo
- Actitud: sin la actitud de compromiso, de querer aprender más, no la vas a hacer
- Ser agradecido: nunca subirte a un escalón, si hay que creérsela, pero nunca sentirse por encima de nadie. Creo que la gratitud es clave para abrirte muchas puertas
- Mucha disciplina: el arte lo vivo como una disciplina, algo que hay que trabajar y al final la responsabilidad y el esfuerzo se traducen en amor propio para ti y creo que eso es el arte
Cuéntanos sobre el reconocimiento que recibiste en Casa Morelos
“En casa Morelos me hablaron junto a otra chava para invitarnos a exponer nuestras fotos para mostrar la equidad y visibilidad de la mujer”.
“Justamente buscaban plasmar la vida nocturna, que va de la mano con los conciertos y que, como comento, es algo que me apasiona”
“Estoy muy agradecida con eso también porque al final es un reconocimiento que hacen hacia mi trabajo”.
¿Qué piensas del papel de la mujer en el mundo de la fotografía?
“Justo el fin de semana me tocó conocer a la fotógrafa de Ximena Sariñana (y a la misma Ximena) y el simple hecho de estar compartiendo escenario con la fotógrafa fue una experiencia que me llenó muchísimo”.
“Es una industria en donde siempre ha predominado el poder del hombre y la verdad es que me da gusto toparme cada vez con más mujeres fotógrafas que la están rompiendo como ella”
“Se crea una magia muy linda, no sé si sea por el tema del género pero te encuentras un ambiente de empatía, solidaridad y de echarnos la mano. Entre mujeres hay mucha sororidad”.
“Hay también una creencia o estereotipo de que también es peligroso el tema de trabajar entre artistas, pero me ha tocado una excelente experiencia, han sido muy respetuosos, no solo a mi persona sino a mi trabajo”, comparte Nayeli Solorio, compartiendo que su más grande sueño es trabajar de lleno con una banda “Y sé que lo voy a lograr”, finaliza.