La historia de la Guía Michelin no comenzó como la de la guía icónica de gastronomía que es hoy, sus raíces se remontan a Francia a finales del siglo XIX y sus inventores, lejos de ser chefs, se dedicaban a vender neumáticos
La historia de la Guía Michelin no comenzó de manera glamurosa como todos esperaríamos; se remonta a 1889, a la pequeña ciudad francesa Clermont-Ferrand, cuándo los hermanos André y Edouard Michelin fundaron su, ahora mundialmente famosa, empresa de neumáticos en una época en la que había menos de 3 mil coches en el país europeo.
Los franceses comenzaron a idear planes para motivar a los automovilistas a viajar y así impulsar las ventas de automóviles y neumáticos, de ahí fue que salió la primera versión del pequeño cuaderno rojo, que contenía información útil para los viajeros; mapas, ubicaciones de gasolineras, instrucciones sobre cómo cambiar una llanta y más tips para los pasajeros.
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Luego de 20 años de organizar, actualizar y recopilar información para la guía, los creadores se percataron de que debían vender su producto cuando vieron que en una tienda de neumáticos usaban el pequeño libro rojo para nivelar un banco de trabajo. Desde entonces, la Guía Michelin comenzó a venderse por siete francos.
Directorio del buen comer
Fue en 1920 que se incluyó una lista de hoteles en París, además de las listas de restaurantes por categorías específicas; por otro lado, los hermanos dejaron de vender anuncios pagados, lo que le dio validez a la cada vez más reconocida guía roja.
Fue en este periodo que los hermanos contrataron a los misteriosos inspectores anónimos para hacer visitas y reseñas que aportaran a la creciente sección de recomendaciones; Seis años después, la guía comenzó a otorgar estrellas a establecimientos de alta cocina, en aquel momento solo se daba una sola estrella, sin embargo, cinco años después se decidió la jerarquía de cero, una, dos y tres estrellas, y en 1936 se publicaron los criterios para las clasificaciones de las mismas.
Fue gracias a su enfoque formal y único que las guías se convirtieron en un éxito de ventas durante el siglo XX; en la actualidad, el directorio tiene una recopilación de más de 40 mil establecimientos ubicados en más de 24 territorios que abarcan tres continentes. Se estima que se han vendido más de 30 millones de ejemplares en todo el mundo.
Hoy, la notable previsión de los hermanos fundadores de Michelin ha dado a la empresa una vocación tan relevante en el siglo XXI como lo fue en 1900: poner la conducción, el turismo y la búsqueda de experiencias inolvidables al alcance de todos.
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Guía Michelin llega a México
Los horizontes de la guía se expanden conforme van pasando los años; a principios del 2023 se anunciaron las incorporaciones de Atlanta, Georgia; Colorado, Argentina y su retorno a Río de Janeiro y São Paulo. Sin embargo, a mediados de octubre se confirmó la entrada del libro rojo a territorio mexicano.
Este movimiento es, sin duda, un gran paso al reconocimiento de la gastronomía mexicana. Sobre el tema, Gwendal Poullennec, director internacional de la guía, mencionó que los inspectores de la misma han explorado ya el país, recorriendo su capital, sus zonas costeras, la belleza de Oaxaca y el esplendor de Baja California.
Son la Ciudad de México, Oaxaca, Baja California, Los Cabos y Nuevo León los principales escenarios a considerar, Poullennec menciona incluso que los inspectores Michelin ya han acogido los sabores de estos destinos.
La colección de restaurantes mexicanos con estrellas Michelin se dará a conocer durante el 2024, sin embargo, son los sabores locales los que tendrán el protagonismo dentro de la selección que ya genera expectativa entre los seguidores de la guía roja.
