Fotografías: Jesús Ruíz / Arte: Eduardo Torres
Un bello rostro, un hermoso paisaje o una buena copa de vino mirando el atardecer, son algunas de las principales fuentes de inspiración de Rafael, el reconocido artista plástico lagunero que ha logrado recorrer el mundo e inspirar a través de sus obras a miles de personas que se han deleitado con sus creaciones.
Con 40 años de trayectoria como paisajista, nuestro invitado estelar nos abre las puertas de su maravilloso estudio donde pasa la mayor parte del tiempo creando, imaginando y, por supuesto, pintando. “La gente no me creería si les digo que he llegado a sentarme frente al caballete más de 70 horas al hilo, sin dormir; es una sensación fantástica ser capaz de sacar todo lo que uno se ha contenido a lo largo de los años”
La historia de su trayectoria como artista la tiene muy clara; “empecé un 14 de febrero de 1979 a las 7 de la mañana, lo recuerdo bien porque el día 12 me dije a mí mismo: ‘soy artista; esto (mi trabajo actual en ese entonces) no es para mí’. Renuncié un día después. Muchos de mis amigos se convencieron de que sería un bohemio, pendenciero, borracho y que, tarde o temprano, les empezaría a pedir prestado, porque un artista se muere de hambre”. Pero es que siempre tuvo ese don para la pintura, nos comenta que de pequeño le era muy fácil realizar las tareas y los trabajos de la escuela. Se considera autodidacta y le debe una gran cantidad de su éxito al trabajo constante.
Sus primeras obras fueron como retratista; “tuve una etapa en la que me gustaba dibujar fachadas de capillas, callejuelas, ¡vaya! pintaba todo lo que pudiera; sin embargo, en plan convenenciero me incliné por el retrato, por supuesto porque la vanidad siempre paga, tenía que irme a la segura en mis inicios, no contaba con un padrino que me apoyara, mi mecenas es mi obra”, enfatiza Rafael. Ese tipo de obras le funcionaron como modus vivendi hasta que un amigo lo retó a pintar un paisaje y fue ahí donde comenzó su exitosa carrera como paisajista. Fue a rincones hermosos de nuestro país como Amecameca, Nepantla y al pie de los volcanes. En la actualidad la técnica que más le gusta es el óleo, comenta que alguien que sabe leer un lienzo puede saber que pasa con su carácter, estado de ánimo y sentimientos.
Siempre la pregunta normal de cualquier reportero a un artista es qué busca transmitir a través de sus pinturas; con Rafael, un personaje que ha logrado recorrer el mundo y presentarlas en lugares asombrosos traspasando fronteras, no fue la excepción. Nos platica que en estos tiempos donde México se ha visto envuelto en tantos momentos desagradables, donde existe corrupción y violencia, el arte debe ser un oasis donde la gente recupere la energía y el afán de seguir viviendo, observar las cosas bellas para otorgar un momento de alegría en la obra.
Uno de los momentos más significativos a lo largo de esta fabulosa carrera ha sido el mural que logró hacer en Italia, una obra a la que entró media hora antes de que cerrara la convocatoria puesto que era su último día en el país de la bota. Al enterarse como ganador del concurso puso manos a la obra. “La ciudad celebraba 200 años de la liberación del feudalismo, con motivo de ello, la ONU propició la realización de un mural”, nos explica Rafael. Una de las situaciones que más llamaron su atención fue que muchos artistas italianos iban a verlo trabajar en el mural, por supuesto en forma de crítica y envidia; sin embargo, comenta Rafael que esas personas que eran sus acérrimos rivales, hoy en día son sus amigos, habló con ellos y les presentó su forma de trabajo, situación que los maravilló por la forma tan fluida y fácil, muy diferente a la rigidez que presentan los artistas italianos.
Para la develación del mural se armó el evento más importante de Salerno en toda la historia. No solamente Televisa estuvo presente sino que también RAI, una de las compañías de radiodifusión más famosas de Italia. Mario Moya Palencia, embajador de México, fue invitado por Rafael al evento y asistió, al igual que el secretario de Cultura de Italia. El evento resultó ser más mexicano de lo esperado, estuvieron presentes un trío huapanguero y el ballet mexicano de Cerro Azul, Veracruz. Además hicieron acto de presencia 16 presidentes municipales y tres gobernadores.
Hablar de sus mejores creaciones es como preguntarle a una madre cuál es su hijo favorito, cada una de sus obras lo ha llevado a descubrir nuevos espacios, por supuesto una es más aplaudida que otra, pero todos son sus hijos. Actualmente podemos encontrar su trabajo en Galería Amart de Torreón, galerías y centros culturales en París, Florencia y Atlanta, así como en San Miguel de Allende y Ciudad de México, por mencionar solamente algunas.
Para celebrar 40 años de artista buscará que todas sus obras lleguen a los habitantes de la Comarca Lagunera y sus alrededores. Comenta que un artista experimenta hasta llegar a su obra definitiva; con él sucedió al revés, empezó a experimentar con el paisaje, le dio un toque diferente y el extra personal. Finalmente otorga un mensaje a los jóvenes talentos de la pintura en México: “de jóvenes nos queremos comer el mundo, traen toda la energía y los sueños, hay que complementarlo con trabajo, es el mejor cauce para lograr tus metas. El trabajo te lleva al éxito”.
