El Estadio Revolución de Torreón fue un icono nacional y uno de los mejores ejemplos de Art Decó. Fue inaugurado el 15 de septiembre de 1932 en el gobierno de Nazario Ortiz Garza y proyectado por el maestro Zeferino Domíngunez Villarreal.
Durante 2019 fue rehabilitado en su totalidad, rescatando principalmente la vista del edificio que se encontraba totalmente obstruida debido a la puerta de acceso y publicidad impedía la vista panorámica de la fachada.
Los trabajos coordinados por la Dirección de Obras Públicas a cargo de Tomás Galván se enfocaron en la demolición del acceso principal, ya que se obstruía totalmente la vista principal del edificio. Se hicieron modificaciones en las construcciones laterales. Se resanaron los muros muros, techos y acabados.
En el acceso a la puerta principal se cambiaron los pisos de concreto, de pavimento y adoquín, por unos más modernos de 30×30. Se pintó todo el Estadio con una paleta más clara y se resaltaron los relieves de Arte Decó en un tono más obscuro.
También se enfatizaron los elementos decorativos para resaltarlos, se restauraron los relieves en yeso de Nazario Ortiz Garza, así como las escenas de la Revolución.
Se le dio un tono uniforme a las banderas que enmarcan el acceso principal, los remates se pintaron en color terracota y en color bronce los relieves de motivos de la Revolución Mexicana.
Para una mejor iluminación se repararon los faroles históricos originales del estadio y se le agregaron nuevas luminarias para darle un impacto visual a la imagen nocturna del Estadio.
