Con una amplia trayectoria y una vida dedicada al servicio, Claudia Martínez Filizola, tiene como propósito de vida el ser un importante agente de cambio entre las zonas y las personas vulnerables de México.
En ese sentido, ha acumulado una experiencia de más de una década de aprendizaje, de vocación y principalmente de estar atenta y consciente del entorno que nos rodea para fomentar el bien común.
Este mes de abril se cumplen los primeros seis años de vida de “Los amigos de la esquina”, organización sin fines de lucro que fundó en Tulum en conjunto con Jaime Kohen y Francisco Rocha, mediante la cual se provee a los niños y niñas mayas de las herramientas necesarias para tener un desarrollo integral.
“Llevo muchos años en el mundo de las fundaciones y es una gran satisfacción el poder trabajar más allá del éxito profesional, es decir, es toda una filosofía de vida porque mi trabajo es algo que me apasiona, me divierte y me siento motivada todos los días”.
“Aprendí a vivirlo como un todo, no es solamente un trabajo, es un camino de transformación, evolución y consciencia, todo lo que me beneficiaba a nivel personal como el yoga, meditación o el baile son las cosas que enseñamos”
“Tengo además 10 años trabajando y especializándome con los niños de comunidades vulnerables en varias fundaciones internacionales”.
“Algunas de ellas son Viva la Gente, Gamnol, en los centros de la Madre Teresa de Calcuta, en la Sierra Tarahumara entre otras”.
Estudié en el Tec de Monterrey Licenciatura en Psicología Organizacional y estuve tanto en Cemex en la parte de recursos humanos, después pasé a FEMSA con un proyecto comunitario llamado CAPE, que está inspirado en KIPP, fui la directora y líder del proyecto.
Era una escuela para niños del polígono del centro de Monterrey. Son varias colonias con las que trabaja en FEMSA, estuve allá dos años y medio”, comparte Claudia Martínez Filizola.
TULUM, UN NUEVO DESAFÍO
Se trasladó a Tulum no solamente para cambiar de horizonte, sino para ser partícipe y tocar los corazones de las distintas comunidades de origen maya que habitan en la región, con las que trabaja en conjunto a través de “Los amigos del esquina”, proyecto que fundó con ese noble objetivo.
“Vine a Tulum porque quería vivir en el sureste de México, conocer más de la comunidad maya”.
“Ese era como un llamado que tenía, estar cerca de eso y del mar, cuando llegué buscaba la manera de aportar y así comenzamos a trabajar en la fundación”.
“Empezamos desde cero, no existía y fue una buena manera de cubrir las necesidades de la zona, fuimos conociendo a las personas adecuadas y se logró fundar Los amigos de la esquina”.
“Los dueños del terreno tenían la intención de construir un edificio para rentarlo mediante AirBnb, pero cuando conocieron a los niños, tomaron la decisión de donarlo para poder construir lo que hoy son nuestras instalaciones”.
COMUNIDAD DE APRENDIZAJE
Son ya seis años de vida de la fundación a la que ha dedicado un gran esfuerzo y en la que Claudia Martínez Filizola ha podido formar parte del desarrollo físico, mental, emocional y espiritual de miles de niños que han pasado por ese espacio de tanto aprendizaje.
“Se llama así porque estamos situados en una esquina del centro de Tulum y, los niños les decían a sus papás que iban con sus amigos a la esquina”.
“Era un terreno baldío y lo pudimos transformar en lo que es hoy, todo un punto de reunión para los niños y niñas de la comunidad con la ayuda de todos los que viven alrededor”.
“Nosotros le llamamos comunidad de aprendizaje porque se fundamenta bajo el concepto de que todos aprendemos de todos, es decir que los niños también tienen mucho que enseñar y se fusionan muchas nacionalidades”.
“Es un método de educación alternativo muy similar a los sistemas que parten de la función de ser distintos a la educación habitual; los adultos o colaboradores aprenden entre ellos y, aquí entra un concepto antropológico en el que, la comunidad maya le enseña al resto del mundo cómo vivir y, los mexicanos hacemos lo mismo con los extranjeros, todos somos una especie de puente en el que la educación pasa de un lugar a otro”.
SEXTO ANIVERSARIO
Desde sus inicios, “Los amigos de la esquina” ha cautivado los corazones de quienes han tenido la oportunidad de aprender de él, de intercambiar experiencias para dejar enseñanzas de valor al resto de la comunidad.
“En estos seis años se ha trabajado mucho y hemos logrado muchas cosas, pero el reto más grande fue permanecer abiertos durante la pandemia”.
“Necesitábamos ser un foco de esperanza y comenzamos repartir despensas, entregamos dos mil de ellas y también se construyó un centro comunitario, que fue en lo que se transformó el espacio”.
“Si bien ya estaba el edificio, hay toda una historia detrás en la que se consiguieron los fondos, se colaboró con Mom I´m Fine, que es un influencer filantrópico de Bélgica, nos ayudó a conseguir el dinero a través de sus seguidores en redes”.
Hay un gran equipo que, junto a Claudia, están dedicados a dar sostenibilidad social al proyecto.
Es a través de donaciones de personas de todo el mundo que ha podido salir adelante, personajes que son reconocidos como “Guardianes” gracias a que, de alguna u otra manera, ven por sus semejantes.
“Es gracias a donaciones de personas de todo el mundo que ha podido salir adelante, personajes que son reconocidos como “Guardianes” gracias a que, de alguna u otra manera, ven por sus semejantes”.
DE QUÉ FORMA PUEDES PARTICIPAR:
- Síguelos en: @ladle.mx
- Puedes ser voluntario si visitas Tulum, escribe a: info@ladlemx.org
- Ser embajador y comparte su historia para poder conocer más de la cosmovisión maya
- Comparte tu abundancia siendo un guardián. Dona de forma mensual a través de un cargo directo a tarjeta de crédito
- Tus hijos pueden ser parte del curso de verano y pasar un tiempo en la playa viviendo un intercambio cultural
DONA AQUÍ:
- PAYPAL: donaciones@ladlemx.org
- TRANSFERENCIA ELECTRÓNICA O DEPÓSITO BANCARIO:
- Los Amigos de la Esquina A.C. BBVA Bancomer cuenta: 0111013807
- CLABE: 012180001110138070