En los próximos años, gracias al fenómeno del nearshoring, México podría experimentar un aumento de hasta un 20% en las transacciones relacionadas con levantamiento de capital, deuda, así como fusiones y adquisiciones, consolidándose como uno de los países más dinámicos en Latinoamérica en este ámbito, según los análisis de Vector Banca de Inversión.
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Nearshoring en México, un evento positivo
El nearshoring, que impulsa la relocalización de cadenas productivas, se percibe como un fenómeno con efectos positivos tanto para las empresas nacionales como para las extranjeras.
Los sectores más atractivos y activos en fusiones y adquisiciones en México en los próximos dos años incluyen manufactura, logística, transporte, bienes raíces industriales, tecnología y servicios financieros.
Se anticipa que para el año 2024 habrá un aumento significativo en la actividad de fusiones y adquisiciones, así como en el levantamiento de capital y deuda, impulsado principalmente por el T-MEC y los beneficios del nearshoring. Factores como el conflicto comercial entre Estados Unidos y China continúan generando demanda para la reubicación de empresas en México, posicionándolo como uno de los destinos más atractivos para la inversión en Latinoamérica, según Rogelio Leal, director de Asesoría Financiera y Mercados Privados de Vector Casa de Bolsa.
Actividad en México
Ejemplos concretos de esta actividad derivada del nearshoring incluyen transacciones en el sector de Bienes Raíces Industriales, como la adquisición de 46 edificios industriales por 662 millones de dólares por parte de Fibra Mty, y la compra de propiedades industriales y logísticas por más de 330 millones de dólares en la frontera norte por parte de Fibra Prologis.
En los últimos dos años, se destacaron operaciones como la venta del negocio de confitería Ricolino por parte de Grupo Bimbo, la adquisición de la cadena suiza Valora por parte de Fomento Económico Mexicano (FEMSA), y la fusión del negocio de contenidos, según indican los especialistas.
