En el umbral del 2024, nos encontramos ante un panorama de de transformación en Saltillo y Ramos Arizpe. Más allá del fulgor mediático de Tesla, hay un crecimiento real sostenido y significativo en la región. No es el hype de Tesla. Realmente son tendencias geopolíticas y cambios en el paradigma de manufactura, asegura Luis Lindsey.
México es el repositorio de las operaciones de manufactura que están regresando al continente, y el norte del país tiene una infraestructura favorable para que esto suceda.
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El crecimiento hormiga: inversiones menos conocidas pero cruciales
Mientras Tesla acapara la atención, otras inversiones industriales en la zona de Derramadero, al sur; y en Ramos Arizpe al Norte están creciendo de manera constante. Según la secretaría de economía, las ventas de autopartes internacionales del estado de Coahuila, antes de la pandemia, eran aproximadamente de 8 mil millones de dólares.
En el tercer trimestre del 2023, las ventas ascienden a casi 10.5 mil millones, un 14% más.
Según el reporte, son casi 100 mil empleos nuevos y esto sigue creciendo. Hace unas semanas hubo un evento de reclutamiento en la Universidad Carolina, y se hablaba de una oferta de casi 400 vacantes solo para personal administrativo.
Este crecimiento, aunque menos visible, está creando una robusta red de oportunidades laborales y económicas. Entonces en 2024 podemos esperar más posiciones abiertas que en 2023.
El crecimiento industrial no está exento de desafíos. El desabasto energético y la creciente demanda de infraestructura son temas que necesitan una atención inmediata.
La región enfrenta un desafío crítico en términos de mano de obra. Pero este desafío también representa una oportunidad para repensar nuestras estrategias de empleo y formación laboral. El desabasto de mano de obra, va a traer nuevos habitantes a la ciudad, que ocupan casa, auto y recursos. Esto va a poner más presión en las vialidades, seguramente subirá el precio de los terrenos y las rentas.
Por otro lado, estoy seguro que hará más calor. Coahuila, al igual que muchas otras regiones industriales, enfrenta desafíos ambientales y climáticos significativos. El aumento de las temperaturas y la escasez de recursos como el agua son preocupaciones crecientes.
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El 2024 para Luis Lindsey
Mirando hacia el 2024, Saltillo y Ramos Arizpe se perfilan como un epicentro de crecimiento industrial y urbano. Con una mezcla de desafíos y oportunidades, la región está en una posición única para modelar un futuro prometedor. Tenemos un problema que es “bueno tener”. Hay bonanza, hay actividad económica y prosperidad. Si actuamos convenientemente para atender estos problemas, son una bendición. El enrarecimiento económico y el desempleo son problemas que deterioran el tejido social y complican su solución.
