Por Emma Molina
Directora Galería Emma Molina
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Gracias al arduo trabajo de mi madre y padre en 1976 pasé una temporada en París. Mientras que en ese año terminaba su sexenio Echeverria en México, yo viví en la ciudad más bella del mundo con un libro en la mano: Rayuela, de Julio Cortázar, menciono en particular a este autor por la nueva edición conmemorativa del 50 aniversario de Rayuela.
La novela que el escritor de origen argentino comenzó a soñar en 1958, se publicó en 1963. Con ella cambió la historia de la literatura y agitó la vida de miles de jóvenes en todo el mundo, sobre todo quienes tuvimos la suerte de estar en París durante esos años.
Plena de ambición literaria y vital, renovadora de las herramientas narrativas, destructora de lo establecido y buscadora de la raíz de la poesía, durante todas estas décadas Rayuela, la historia del intelectual Horacio Oliveira y su relación con Lucía, una joven uruguaya apodada La Maga, siguió siendo leída con curiosidad, asombro, interés o devoción. La novela llega a los lectores hoy, en su 50 aniversario, acompañada de un mapa del París de Rayuela y de un apéndice en el que Cortázar mismo cuenta la historia del libro con el que buscó el más allá de todas las fronteras. Otros autores han expresado que ningún otro escritor dio al juego la dignidad literaria que Cortázar, ni hizo del juego un instrumento de creación y exploración artística tan dúctil y provechoso; y que su obra abrió puertas inéditas.
Rayuela vuelve a las librerías con la forma de un tomo casi más ancho que alto, mil ciento y algo de páginas, tapa dura y el mismo dibujo en la portada de una rayuela dibujada con gis que llevaba la edición de Sudamericana, sólo que ahora, en la base del dibujo no dice “Editorial Sudamericana” sino “Edición Conmemorativa. Real Academia Española. Asociación de Academias de la Lengua Española”.
Esta novela es una evocación de mil imágenes e ideas de modo que hay una Rayuela para cada lector. No hace mucha falta una explicación sobre lo que sigue después, las 699 páginas que Cortázar publicó en junio de 1963 y que, pese a ser un texto transgresor, retador para el lector y de endemoniadas instrucciones de uso, tuvo un impacto inmediato en la cultura hispana y más allá. El sólo nombre de Rayuela es una evocación de mil imágenes e ideas: el jazz, la entrada en la edad adulta, la marihuana, lo incomprensible del amor y del sexo…
- 1914: Julio Florencio Cortázar Scott nació el 26 de agosto de 1914.
- 1932: Cursó sus estudios en la Escuela Normal de Profesores y en 1932 obtuvo su título para trabajar como maestro rural. Ese mismo año intentó viajar a Europa en un buque de carga junto con un grupo de amigos, pero su misión fracasó. Sin embargo, fue en esa época cuando conoció el libro Opio de Jean Cocteau, que lo llevó a cambiar toda su visión sobre la literatura y aproximarse al surrealismo.
- 1951: El escritor publicó su primer libro de cuentos Bestiario, y gracias a una beca del gobierno francés viajó a París con la firme intención de establecerse allí.
- 1963: En una carta que escribió en 1963 expresó que no guardaba algún recuerdo feliz de su infancia. Su casa en Banfield, Buenos Aires, era un paraíso lleno de gatos, perros, tortugas y cotorras; pero se hallaba inmerso también entre demasiada servidumbre, una sensibilidad excesiva, tristezas frecuentes, asma y primeros amores desesperados.
- 1974: Al comenzar la década de los sesenta Cortázar resaltaría entre las principales figuras de lo que se conoció como el boom de la literatura hispanoamericana, la aparición de su obra Rayuela impulsaría su fama a nivel internacional.
- 1984: Julio Cortázar murió el 12 de febrero de 1984, tres años antes había obtenido la nacionalidad francesa, y el fervor por la lectura de sus obras se mantiene vital
