Marcela Murra Guerrero es una joven Lagunera que actualmente estudia la Ingeniería Industrial y de Sistemas en el Tec de Monterrey y es una de las 35 ganadoras a nivel nacional de la Beca al Talento Emprendedor.
Esto lo logró gracias a su proyecto Art x Marce Murra, en el que la joven ha puesto a prueba sus habilidades, su pasión por el arte y las herramientas que en el camino ha ido adquiriendo.
Art x Marce Murra, surgió como muchos proyectos, a raíz de la pandemia por COVID-19, pues en el encierro Marcela descubrió hasta donde podía llegar su amor por el arte.
Hoy en día el negocio de Marcela sigue creciendo, pues sus obras han llegado a puntos de venta como Cimaco y a ciudades como Guadalajara y Guanajuato.
En entrevista exclusiva para PLAYERS of Life Marcela Murra nos comparte toda su travesía y sus planes a futuro.
Ganadora de la beca al Líder emprendedor
“Para mí haber ganado esta beca, significó tener la perseverancia, entender que las cosas no llegan solas, sino que tenemos que buscarlas y más que nada ayudó a fortalecer mi espíritu emprendedor, a tener esa conexión con mi mente, con mi cuerpo y con mi espíritu”.
“Para mi es muy importante poder transmitir mis ideas, en este caso fue através del arte y lo mejor es que lo pude fusionar con el emprendimiento”.
“Mi negocio nació durante la pandemia. Este periodo tan complicado, yo lo tomé de manera positiva para dar lugar a algo que amo, que es pintar.”
“La primera cosa en la que pude transmitir mi arte, fue mi closet, lo pinté todo con mandalas, que es lo que me gusta: el zentangle art”.
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Un negocio que surgió desde las cenizas
“A a partir de ahí yo empecé a vender mis propios productos y una cosa llevó a la otra, después me enteré de la Beca al Talento Emprendedor y dije: quiero aplicar”.
“Para poder participar me preparé asistiendo a conferencias de Monterrey, investigando y creando las bases de mi negocio”.
Marcela Murra se considera una persona a quien le apasiona hablar en público, relacionarse con las personas, y poder transmitir una emoción. Estas son habilidades que ha seguido trabajando para poder alcanzar sus objetivos.
“Todas estas herramientas me han estado ayudando a crecer como emprendedora, como Marcela y como humana”.
“Yo siento que toda esta preparación previa a aplicar a la beca, me va a beneficiar mucho y quiero seguir aprovechando todas las oportunidades.”
“Además me gusta mucho ir a eventos. Hace poco fui al INC Monterrey mi primer evento con empresarios e inversionistas y estuvo padrísimo”.
El arte como una manera de proyectar los sentimientos
“Yo desde chiquitita estuve en clases de arte. En secundaria, descubrí el zentangle art que es la técnica de dibujar mandalas, pero jamás pasó por mi mente la idea de convertirlo en un negocio“.
“Aunque a mi ya me gustaba pintar, creo que la pandemia fue la situación que me ayudó a fusionar el poder pintar y poder vender”.
“Entonces si no hubiese sido por la pandemia, yo jamás hubiera vendido mi arte”.
“Yo empecé plasmando mi trabajo en cuadros, pero las personas me dijeron “Marce yo quiero tus mandalas en un producto funcional”, entonces se dio la oportunidad de poder plasmar mis pinutas en mesas de madera, ukeleles, guitarras y otros artículos”.
“Mi producto más pedido y más vendio son las mesas, estas las llegué a vender en Cimaco y en una tienda de decoración de Torreón”.
Sin embargo, al tratarse de artículos personalizados gran parte de las ventas de Marcela Murra se dan de manera personal, pues las personas la buscan directamente para llevarle algún artículo personal que deseen personalizar.
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¿Cuántas consideras que son tus ventas promedio?
“Depende de la temporada, en temporadas altas, como diciembre llegué, a vender fácil unas 40 mesas al mes entonces, cada mesa cuesta aproximadamente $1500 pesos”.
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¿Cómo valorar el trabajo de un artista?
“A mi me ha ayudado a ser una persona directa, yo siento que la gente me ha aprendido a valorar por mi forma de ser, porque les digo las cosas desde antes, les hago la propuesta y soy clara y concisa“.
“No me gusta que el cliente no esté satisfecho y que yo no esté satisfecha, entonces siempre trato de dialogar con anticipación”.
“A las personas que se dedican a esto les diría que primero aprendan a darse valor a sí mismos para después aprender a reflejarlo con sus clientes y no tener miedo a a decir cuanto cuesta el arte”.
Proyectos a futuro de Marcela Murra
“Estoy muy contenta porque hace poco en Monterrey platiqué con un emprendedor de allá y estamos en el proceso de fusionar nuestras dos proyectos”.
“Son dos ramas muy opuestas, la de él es nanotecnología y pues la mía el arte, entonces queremos hacer una sinergia entre estas dos y ya próximamente les compartiré de que se trata”.
“Por lo pronto, puedo decir que mi proyecto sigue creciendo”.
“En cuanto a mi carrera, yo quiero en un futuro desarrollar mi propio negocio y apoyarme de la ingeniería, o sea, hacer una sinergia con mi parte artística, pero ya lo iré desarrollando”.
¿Cuál ha sido tu obra favorita?
Mi obra favorita no es mandala, es mi cuadro de la Virgen. Es un regalo para una tía que se llama María Guadalupe.
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Combinar el arte con otra carrera
“Yo diría que los jovenes que tienen un emprendimiento de arte lo deben de complementar con algo más”.
“En mi caso yo no voy para estudios creativos. Yo voy para ingeniería, pero lo creativa jamás se me va a quitar”.
“No me planeo dedicar a ser artista al cien por ciento, pero sí quiero seguir con mis proyectos creativos”.
“Además yo siempre digo que complementar es mejor, no quedarse nada más en una sola cosa y más ahorita que estamos en la era de tener toda la mano, puedes aprender de todo”.
QUOTE
“Lo más importantes tener conexión entre mente, cuerpo, corazón y espíritu”.
Marcela Murra explica esto con una obra de su autoría llamada El Mundo de Marcela
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Me encuentro en el cosmos y la joven rodeada de mándalas soy yo, en la cual estoy sosteniendo una balanza entre mi mente y corazón. La representación de los colibríes polinizan el corazón representan mi florecimiento humano. El farol significa la iluminación y claridad con la que mi mente está conectada con el universo. En la constelación en la cual me encuentro parada tiene dos ojos turcos: el ojo turco azul, el que está a un lado de mi corazón, representando las buenas vibras. Por la otra parte el ojo turco rojo, el que está a un lado de mi mente, significa la determinación. La mariposa que tiene cuerpo de llave significa la incertidumbre con la que navegamos los seres humanos, y a la cual nunca tendremos acceso, ya que es “El secreto de la vida”, solo nos queda contemplar y estar presentes en “El Aquí y en el Ahora”.
