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Uno histórico, otro en vías de serlo. Jared Borgetti y Carlos Acevedo juntos en nuestra Historia de Éxito

Jared Borgetti y Carlos Acevedo nos comparten un poco de sus vidas, de su pasado y su presente, además de sus planes a futuro

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Alberto Ruiz

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Uno histórico, otro en vías de serlo. Jared Borgetti y Carlos Acevedo juntos en nuestra Historia de Éxito nos comparten un poco de sus vidas, de su pasado y su presente, además de sus planes a futuro.

JARED BORGETTI, LA LEYENDA VIVIENTE

Pocas personas pueden jactarse de ser reconocidas como símbolo de identidad de una región o de un país y Jared Borgetti es una de ellas.

Su nombre está asociado directamente con el club de futbol Santos Laguna y con la Selección Mexicana por ser el goleador histórico del conjunto lagunero y el segundo mejor anotador en la historia del representativo nacional.

Borgetti escribió la historia que muchos quisieran protagonizar, pero hay mucho más en él que el futbolista, que el delantero que nos hizo gritar una madrugada con uno de los mejores goles en los mundiales, si, aquel que le marcó a Italia en Corea – Japón 2002.

Hoy, con 12 años siendo ex jugador, la leyenda del futbol se sinceró y habló con nosotros de lo que su carrera de principio a fin.

Nos cuenta de sus errores y aciertos y de su evolución como persona tras haber pateado por última vez un balón.

“Hoy estoy en otra etapa de mi vida, dejé la carrera de futbolista, pero lo sigo disfrutando y sigo viviendo del futbol, veo y hablo de futbol, sigo dentro de lo que mejor se hacer”.

“Afortunadamente me he rodeado de gente a la que le he aprendido y, en esta nueva etapa de analista, trato de ser lo más claro y conciso para que los mensajes se comprendan mejor”, nos cuenta el artillero.

Ya pasaron 26 años desde aquel día en que un incipiente jugador llegó a La Laguna con miles de sueños en las maletas, pero con un futuro incierto que a final de cuentas le fue más generoso de lo que él mismo esperaba.

“Yo llegué a Torreón en 1996 sin la gran emoción de cambiarme de equipo y, en tan solo cinco meses cambió mi forma de pensar y de vivir”.

“Llegué sin la ilusión por ser alguien y terminé siendo alguien importante para el equipo en ese momento, jugué todos los minutos de principio a fin, desde el primer juego hasta que el árbitro pitó el final del juego que nos dio el campeonato en ese Invierno del 96″.

“Hay veces que no sabemos que nos depara el destino y ese es un gran ejemplo”.

Tiene claro que, si por alguna extraña razón, tuviera la oportunidad de volver a empezar, lo haría todo de la misma manera:

“Si lo volvería a hacer, obviamente pasaron muchas cosas buenas, pero más allá de eso, me deja satisfecho el pensar que, cuando buscas identidad y eres parte de eso, es ahí en dónde te das cuenta que todo valió la pena”.

“Santos no era el equipo más famoso, y por eso me quedo con el hecho de que, si buscas el nombre de Santos Laguna, mi nombre va a aparecer”.

“Soy parte de esa historia y eso me llena todos los vacíos que me pueden dejar el no haber jugado en otros equipos”.

“Yo decidí jugar aquí porque aquí me siento bien y la consecuencia es eso, tener una estatua en el estadio“.

“Creo que ahí está la respuesta a las decisiones que he tomado cuando estuve en Santos Laguna, eso me indica que todo me trajo a lo que soy ahora y a tener mi nombre en el estadio”.

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DEL SUEÑO DE NIÑO A LAS METAS CUMPLIDAS

El inicio de todo fue para él como el de casi todos los niños, imaginándose jugar en Primera División y con el equipo mexicano, siendo el héroe de sus propias historias y sin llegar a pensar que todo se haría realidad.

“Cuando era niño tenía el sueño de jugar futbol y salir en televisión”.

“Lo cumplí y no sabía cómo le iba a hacer, realmente no entendía la magnitud de todo eso, después lo logré, pero sin sentirme totalmente realizado, a ese sueño le faltaban muchas cosas que afortunadamente se pudieron cumplir”.

De igual manera, hoy está cumpliendo otro de sus sueños, ahora en su faceta de analista deportivo en la cadena trasnacional ESPN, con la que está teniendo la oportunidad de compartir sus conocimientos y con la que formará parte del equipo en el Mundial de Qatar 2022.

“Es una gran responsabilidad porque lo que se dice tiene valor. No soy periodista, pero digo lo que veo y es lo que he visto toda mi vida”.

“Trato de hacerlo simple para que el aficionado tenga claro lo que se quiere decir respetando la esencia del juego siempre”.

“El aficionado entiende el futbol de otra forma y respeto a todos los que estudiaron, pero en la mesa de análisis, prefiero hablar de futbol y hacer lo que mejor hago”.

“Profesionalmente estoy en las puertas de mi tercer mundial para ESPN”.

“Me gustaría una Dirección Deportiva para poner lo que me tocó vivir, la mayoría de los jugadores venimos de lugares en los que no hay todo”.

“Me tocó salir de casa muy joven para irme a la Casa Club, tuve que ir avanzando de a poco, me iba a los entrenamientos en camión y vi cómo algunos se fueron quedando en el camino y evitar las excusas en esos procesos”.

Jared Borgetti, Santo Inmortal. Foto: El Siglo

SANTO INMORTAL – JARED BORGETTI

Sus 205 goles con la playera albiverde no solamente significaron alegrías y campeonatos, sino que, al final del camino le valieron para ser reconocido como “Santo Inmortal”.

Se trata de una categoría que solamente alcanzan aquellos que, tras su retiro se convirtieron en leyendas y que fueron inmortalizados con una estatua en las afueras del Estadio Corona.

“Es un gran orgullo, mi estatua fue la primera y acompaña a la de otros grandes como Christian Benítez, Oswaldo Sánchez, Rodrigo Ruiz y ahora Oribe Peralta“.

“Todo es consecuencia de lo que se hizo como jugador y no tengo más que agradecimiento a todos los involucrados, es un premio que comparto con toda La Laguna”.

COREA – JAPÓN 2002 Y ALEMANIA 2006

Fueron dos los mundiales en los que defendió la playera nacional, y si bien pudieron ser más, está satisfecho con lo realizado y recuerda con cierta nostalgia, los sentimientos vividos al pisar esas canchas internaciones recibiendo uno de los máximos honores que puede tener un futbolista.

“Jugar el Mundial siendo uno de los 11 privilegiados, escuchar el himno nacional y vibrarlo desde el corazón, eso hace que te sientas muy bien”.

“Son momentos que solamente te regala el juego y, estar en un Mundial es un logro indescriptible”.

“Es una de las mayores recompensas que mi profesión puede otorgar y, haber participado en un par de mundiales me hace sentir orgulloso”.

REFERENTE PARA LAS NUEVAS GENERACIONES

Hoy Jared juega un rol importante como símbolo y como referente en la escuadra lagunera, mucho de los que hoy forman parte del equipo, lo ven como un ejemplo a seguir, entre ellos Carlos Acevedo, a quien acompaña en nuestra portada.

“Carlos es un chavo muy centrado, ha sido paciente y nunca se rindió. Es un gran ejemplo para muchos”.

“No siempre termina jugando el más bueno, termina jugando quien es trabajador y perseverante, quien espera el momento y no se da por vencido”.

“En el futbol hay muy pocas oportunidades y, en ese sentido, Carlos ha sabido aprovechar muy bien cada momento de su carrera, desde el proceso de formación hasta ahora que es de loe mejores en su posición. Es un privilegiado”.

Con Santos Laguna, Jared Borgetti fue campeón de liga en los torneos de Invierno 96 y Verano 01, además de que se distinguió con un par de títulos de goleo individual, en el Invierno 00 y Verano 01.

Jugó en La Laguna de 1996 a 2004, habiendo dejado un insuperable legado de 205 goles en total y tras haberse convertido en el máximo romperredes lagunero.

JARED BORGETTI EN NÚMEROS

Fecha de nacimiento: 14 de agosto 1973
Posición: Delantero
Clubes: Atlas, Santos Laguna, Dorados, Pachuca, Bolton Wanderers (Inglaterra), Al – Ittihad (Arabia), Cruz Azul, Monterrey, Guadalajara, Puebla, Morelia y León
Partidos jugados: 587
Goles: 299
Campeón de Liga MX; Invierno 1996 y Verano 2001
Campeón de goleo individual: Invierno 200 (17 goles) y Verano 2001 (13 goles)

CON SELECCIÓN NACIONAL

Partidos jugados: 89
Goles: 46
Mundiales: Corea – Japón 2002 y Alemania 2006

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CARLOS ACEVEDO, LA ESTRELLA DE LA ACTUALIDAD

Nadie puede negar que Carlos Acevedo es el mejor portero mexicano de la actualidad.

Bajo los tres palos de la meta santista, el lagunero encuentra en cada partido, un poco de la gloria que busca constantemente; sus atajadas demuestran el gran nivel que atraviesa y por qué va en camino en convertirse uno de los grandes ídolos del futbol comarcano, tal como lo es Jared Borgetti.

Nacido en Torreón, Acevedo lleva ya casi 20 de sus 26 años de vida dedicados al juego, tiempo en el que tuvo que sacrificar muchas cosas que suelen normales en la vida de un niño o de un adolescente, sin embargo, la recompensa ha sido más que satisfactoria.

“Estoy en el futbol desde los 10 años de edad, la verdad es que siempre me gustó el deporte y encontré en el futbol lo que más quería”.

“Como profesional llevo ya ocho años de carrera, todos en Santos Laguna y vividos con mucha emoción y deseos de sumar más a mi carrera”.

“En esta profesión se sacrifican muchas cosas que para los demás son cotidianas”.

“Es muy duro no poder compartir los cumpleaños de mis papás o mi hermana y todas las fechas que son especiales para cada familia, además de que se vive fuera de casa por mucho tiempo”, confiesa el joven deportista.

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Con más de un centenar de partidos con la escuadra lagunera, Acevedo, tiene claro que aún falta mucho camino por recorrer y muchas metas por lograr.

“Hay que ir paso a paso, subiendo un escalón diario, pero se puede”.

“Todo está en no dejar de soñar, siempre sueño en lo más alto y eso aplica para el doctor, el policía, el bombero, el político o en cualquier profesión que se ejerza, hay que tener valores y las cosas buenas suceden”.

“El talento puede ser natural, pero se debe estar preparado para cuando requieran de tus servicios”.

“Mi mayor deseo es tener mucha salud para poder jugar por muchos años, esto a nivel personal, y a nivel profesional sigo buscando el título de liga, ojalá se nos dé pronto”.

“Deseo también continuar defendiendo la portería de la Selección Nacional ya que nada me daría mucho orgullo que ser el portero mexicano en competencias oficiales”.

AMOR POR LA PORTERÍA

Se dice que ser portero es una de las posiciones más ingratas dentro del juego, ya que los errores que comete un guardameta suelen significar derrotas.

Pero para Carlos, defenderla es algo que le ha retribuido grandes triunfos y le ha dejado inolvidables satisfacciones.

“La posición más complicada para muchos, pero para mí es la más bonita y la que más disfruto”.

“El tema de poder tapar 20 balones y de pronto se te va uno ya eres el villano”.

“La parte mental es lo más difícil y hay que hacerlo con deseo, no se puede dar ningún balón por perdido y eso aplica en cualquier profesión o actividad”.

LA LAGUNA Y SU GENTE, UN EJEMPLO

Por sus orígenes familiares, Carlos Acevedo es totalmente lagunero; se identifica con los habitantes de la región y entiende sus necesidades, además de conocer ampliamente los sentimientos de una afición que, así como quiere, exige.

“Ser lagunero es ser guerrero, trabajador, es un adjetivo y, a nivel nacional se nos reconoce como la tierra de los grandes esfuerzos y eso es lo que somos“.

“Somos trabajadores, nos gusta vivir bien y somos personas muy cálidas”.

“Y así como es la gente de aquí es la afición del equipo, cálida, generosa y cariñosa, pero también demandante y exigente, sabemos bien que, si no se demuestras todo en la cancha, la afición te lo hará saber”.

SELECCIÓN NACIONAL, CARLOS ACEVEDO

El futbol es de momentos y el de Carlos Acevedo es inmejorable por lo que el llamado al Conjunto Nacional para partidos oficiales llegará tarde o temprano y seguramente se adueñará del puesto tal como lo hizo en La Laguna.

Por lo pronto ha disputado cuatro encuentros con el “Tri”, mismos que fueron contra Chile, Guatemala, Surinam y Paraguay habiendo recibido apenas tres goles en contra.