Si te escapas a la Ciudad de México debes alojarte en esta bella avenida y disfrutar de una de las capitales más cosmopolitas de Latinoamérica. Además de una gran variedad de restaurantes y cafés, de una amplia oferta cultural y de ejemplos únicos de arquitectura moderna, podrás relajarte en uno de los pulmones verdes de la ciudad: el Bosque de Chapultepec
Ciudad de México es de esas ciudades que dejan huella y a la que uno siempre está dispuesto a volver. Y es que esta urbe, que con cerca de 9 millones de habitantes es una de las más pobladas del mundo, alberga un sinfín de recovecos y barrios variopintos que nos permiten viajar en el tiempo, desde la época prehispánica hasta la colonial, pasando por una propuesta cosmopolita que nada tiene que enviar a otras grandes capitales.
En este sentido el Paseo de la Reforma, que se prolonga durante 12 kilómetros atravesando el corazón de la ciudad, es una de las zonas más modernas. Además de centro financiero y comercial, esta bella avenida, construida en 1860 con el objetivo de comunicar el Castillo de Chapultepec y el Palacio Nacional, es uno de los centros turísticos más visitados. Si tienes pensado escaparte a la capital mexicana, alójate en uno de los impresionantes hoteles que hay en ella, como el recientemente inaugurado Barceló México Reforma, y desconecta realizando alguna de las siguientes actividades.
1. Recorre el paseo con el turibús para situarte
Como el Paseo de la Reforma es muy largo, lo más conveniente es que lo recorras en el Turibus que une esta zona de la ciudad con el centro histórico. En el camino podrás observar algunos de los monumentos más bonitos que jalonan esta impresionante avenida, como el Ángel de la Independencia, bajo cuya espectacular columna se encuentran los restos de algunos de los héroes de la patria.
2. Empápate de arquitectura moderna
Además de hacer una inmersión en el pasado, el Paseo de la Reforma pondrá a tu alcance increíbles ejemplos de arquitectura moderna como el edificio “Torre Mayor”, también conocido como el “Empire State” de Ciudad de México, que con sus 55 pisos y sus 225 metros de altura es uno de los rascacielos más altos de toda Latinoamérica.
3. Dedica la mañana al arte
Aprovecha ese mismo circuito para acercarte al Museo de Arte Moderno y, sobre todo, al Museo Nacional de Antropología, uno de los más importantes de Latinoamérica por su rico legado de las culturas prehispánicas.
4. Relájate en uno de los pulmones de la ciudad
Cuando salgas seguro que querrás hacer un alto en el camino para asimilar todo lo aprendido, y nada mejor que hacerlo en uno de los pulmones verdes de Ciudad de México: el Bosque de Chapultepec. Allí podrás caminar tranquilamente; si vas con niños visitar el zoo o el parque de atracciones; o acercarte a alguno de sus estanques y desconectar viendo nadar a los patos con un bello atardecer mexicano de fondo.
5. Recupérate en un 5 estrellas ubicado en el km 0 de la avenida