Hace siete años, Marisol Ortega se alejó de su profesión de abogada para emprender un negocio que, al día de hoy es sólido y está en plena evolución.
Apoyada por su familia, abrió Café Abad, en el que se ofrecen bebidas hechas a base de café, pero con un toque de distinción, con una elaboración artesanal que las distingue del resto y que las ubica como punta de lanza en un mercado que tiene mucha competencia.
En entrevista, Marisol nos cuenta un poco de cómo ha sido el desarrollo de Café Abad y las transiciones a lo que hoy es Monab Café, marca registrada que cuenta con tres sucursales y que tiene serios planes de expansión.
Café Abad
“Empezó hace siete años con tres socios, entonces teníamos una visión diferente, con más cultura del café, pero vimos las necesidades de la gente, que eran bebidas más dulces, por eso cambió el concepto y creamos bebidas que en ese tiempo no existían, acompañadas de dulces o chocolates, bebidas más llamativas y eso nos ha funcionado”.
“Siempre estamos innovando en ese sentido para que la gente siga con nosotros”.
“El nombre quedó registrado el nombre, el logo y la marca de Monab Café, es un proceso de cambio de imagen y con eso viene la apertura de una tercera sucursal”.
“Somos los mismo, pero con otro nombre. Estamos también en vísperas de crear la marca de café para venderlo en grano y molido, todo con nuestra propia marca”.
Los retos
Por supuesto que no ha sido fácil, ha tenido fracasos que sirvieron de experiencia para crecer, se tuvieron que dar giros importantes en el camino y se tomaron decisiones difíciles.
“Lo más difícil fue acertar en el mercado, saber qué es lo que le gusta a la gente, eso es lo más duro, pero afortunadamente lo hemos bien, hicimos estudios de mercado y en eso nos hemos apoyado para crecer como empresa”.
“Decidimos emprender este negocio y hemos tenido fracasos y aciertos, de eso hemos aprendido para continuar. Hoy tenemos una empresa creada desde cero”.
“Se necesitó mucha fuerza y valor, abrimos en 2015 la primera sucursal y, tres años después la segunda, hoy estamos por abrir la tercera junto con nuestra nueva marca”.
El éxito
La clave de su éxito radica no solamente en productos diferentes e innovadores, sino en la participación de varios miembros de su familia.
“El apoyo en pareja es importante, estamos mi esposo y yo, somos familia, estamos involucrados más integrantes de la familia y gracias a eso hemos podido crecer”.
“Es realmente una empresa familiar en la que cada quien hace su parte y entre todos nos apoyamos”.
Planes
El siguiente paso a dar es el de fabricar su propio café en grano y molido, y junto a eso el estandarizar el modelo de negocio para convertirlo en franquicia. Marisol considera, en ese sentido, que a finales de este año podrá realizarlo.
“Estamos por creando manuales para estandarizar la marca y poder franquiciar, ese es el siguiente paso, tenemos mucha confianza porque son paso sólidos y firmes. Cumplimos con los procesos para poder llegar a ser una franquicia”.
“El plan es estandarizar, dejar listo todo para poder franquiciar fuera de La Laguna, estamos en ese punto en que la empresa está creciendo rápido, pero con tranquilidad”.
“Para finales de año planeamos abrir la cuarta sucursal que será ya con el modelo de franquicia, la idea es ir creciendo en espiral, irnos ampliando con la logística para hacerlo, primero iremos a ciudades cercanas y después queremos tener presencia nacional”.
Finalmente, Marisol deja un consejo para aquellos emprendedores que están en la lucha por desarrollarse, a ellos les dice que sean valientes y no bajen los brazos a pesar de los golpes que la vida les puede llegar a dar.
“Luchen por sus sueños, que no se cansen, si ven una barrera realmente traten de brincarla, eso no debe detenernos. Hay que enfrentar los obstáculos, a veces los fracasos son muy duros, pero eso no nos detuvo y hoy somos una empresa en plena evolución”.
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