Fotos por Alejandro Almaraz
Locación: El Álamo, Parque Centro
Con una filosofía basada en la personalización, la sostenibilidad y la conexión emocional con cada proyecto, Altern Arquitectura se distingue por diseñar lugares que transforman la vida de sus clientes
Javier Aragón Rodríguez, fundador de Altern Arquitectura y Diseño, ha construido una firma con una visión clara: crear espacios que no solo sean estéticamente impactantes, sino que también generen bienestar en quienes los habitan.
“El lugar donde vives o trabajas influye en cómo te sientes cada día. Diseñar espacios que generen felicidad es lo que hace que este trabajo valga la pena”
Javier Aragón
1. Espacios con identidad: Diseños que reflejan a sus dueños
A diferencia de muchas firmas que imponen un estilo propio, Altern Arquitectura se distingue por adaptar cada proyecto a la personalidad y necesidades del cliente. “Siempre he pensado que no tengo un estilo definido, porque cada persona tiene gustos específicos”, explicó Javier. Para él, la clave está en lograr que cada espacio tenga carácter, que no sea solo un conjunto de paredes y techos, sino un lugar con alma.
El proceso comienza con una conversación profunda con el cliente. Más allá de medidas y materiales, Javier indaga en su día a día, sus hábitos, sus aspiraciones. Así, cada diseño se convierte en un reflejo de quien lo habita, garantizando una conexión genuina con el espacio.
2. Arquitectura sostenible: Diseñar con conciencia
Para él, la sostenibilidad no es una opción, sino una necesidad. Desde el inicio de cada proyecto, busca optimizar la iluminación natural, la ventilación y el uso eficiente de los materiales. “Un buen diseño puede hacer que un espacio sea confortable sin depender del uso excesivo de energía”, destacó.
El compromiso con el medio ambiente también se refleja en la selección de materiales tecnológicos que imitan la estética de los naturales, pero con mayor resistencia y menor impacto ambiental. De esta manera, equilibra funcionalidad, belleza y responsabilidad ecológica.
3. Más que clientes, socios creativos
Javier entiende que la relación con sus clientes es clave para el éxito de cada proyecto. Su enfoque va más allá de la simple ejecución de un diseño; busca construir una experiencia colaborativa donde cada persona se sienta parte del proceso creativo. “Es fundamental escuchar y saber leer las necesidades del cliente para que su espacio sea funcional a largo plazo”, afirmó.
Gracias a esta filosofía, la firma ha logrado que cada obra no solo cumpla con expectativas técnicas y estéticas, sino que también impacte de manera positiva en la vida diaria de quienes la habitan. Desde áreas sociales hasta residencias completas, cada proyecto se diseña con un propósito claro: mejorar la calidad de vida de sus usuarios.
Un legado en construcción
Javier Aragón ha sabido convertir su pasión en una empresa que transforma ideas en realidades memorables. Su historia es prueba de que la arquitectura va más allá de los planos y los materiales; se trata de crear espacios que inspiran, relajan y conectan emocionalmente con las personas.