El sistema de salud pública en México es poco conocido, pues no solamente abarca el IMSS o ISSSTE, comprende también a Pemex, Sedena, Semar y otras instituciones que prestan servicios a los trabajadores del sector formal de la economía, o que protegen a la población sin seguridad social, dentro de estas últimas se incluyen el Seguro Popular de Salud, la Secretaría de Salud, los Servicios Estatales de Salud y el Programa IMSS-Oportunidades.
El financiamiento de las instituciones de seguridad social proviene de tres tipos de contribuciones: gubernamentales, del empleador y de los empleados.
Los trabajadores del sector formal de la economía (activos y jubilados) y sus familias, son los beneficiarios de estas instituciones, las cuales cubren a 48.3 millones de personas.
Cobertura
– El IMSS cuenta con un régimen obligatorio, que protege a la mayoría de sus afiliados, y un régimen voluntario. El obligatorio comprende cinco ramas básicas: seguro de enfermedad y maternidad, de riesgos de trabajo, de invalidez y vida, de retiro y vejez, y de guardería y prestaciones sociales. Las personas no asalariadas pueden establecer un convenio voluntario con el IMSS a fin de obtener parte de los beneficios médicos del seguro de enfermedades y maternidad.
– Los afiliados al ISSSTE cuentan con un conjunto de beneficios similares a los que ofrece el IMSS. Su seguro de salud garantiza el acceso a servicios de medicina preventiva, maternidad, atención médica, quirúrgica, hospitalaria, farmacéutica, y de rehabilitación física y mental.
– Los asegurados de Pemex, Sedena y Semar cuentan con atención médica, quirúrgica y hospitalaria de primer, segundo y tercer nivel, cobertura farmacéutica y de rehabilitación, seguro por riesgos de trabajo, jubilación e invalidez.
Inversión
El gasto del Gobierno en salud en 2011 fue del 6.2% del PIB, cabe mencionar que es uno de los más bajos de América Latina, por ejemplo el de Argentina fue de 8.1, el de Chile 7.5 y el de Brasil 8.9.
Que México no cuente con una cobertura universal de aseguramiento público de salud ocasiona que casi la mitad de la población desamparada tenga que financiar sus servicios; que los asegurados insatisfechos tenga que acudir al sector privado y pagar directamente por ellos; y finalmente, debido a las asimetrías de información, inducción de la demanda y al desarrollo de un mercado no regulado, en muchas ocasiones se presentan abusos en los que la población paga mucho más de lo debido.
El gasto privado en este rubro se ha identificado como un factor de empobrecimiento para los hogares que están excluidos del sistema, ya sea por no tener acceso a la seguridad social o por no contar con los medios económicos para pagar, de su bolsillo, servicios de salud.
Generalidades
– En el 2000 México ocupó el lugar 144 de 191 países en el indicador Justicia y Equidad en la Contribución Financiera, a través del cual se miden las contribuciones excesivas del hogar para el financiamiento de la salud, mismas que lo ponen en riesgo permanente de empobrecimiento (OMS, 2000).
– El IMSS atiende a más de 80% de la población
– El ISSSTE da cobertura a otro 18%
– Los servicios médicos para los empleados de Pemex, Sedena y Semar, en conjunto, se encargan de proveer a 1%