La vinícola más antigua de América se erige en el valle de Parras, Coahuila, desde hace 427 años; Casa Madero.
Fundada en 1597, esta bodega combina tradición y modernidad en cada cosecha, gestionada actualmente por los hermanos Brandon y Daniel Milmo, quienes lideran el negocio con un fuerte compromiso hacia la excelencia y la continuidad de su legado familiar.
La misión de Casa Madero es preservar y elevar la calidad del vino mexicano, además de difundir la cultura vinícola, integrando el vino en la vida cotidiana de los consumidores.
Casa Madero: Delicia al paladar
A lo largo de los años, Casa Madero ha evolucionado para responder a las preferencias cambiantes del mercado, manteniendo una visión clara en la calidad y en la innovación.
En 2024, su vino 3V ha destacado a nivel mundial al recibir una Doble Medalla de Oro en el certamen Vinus de Argentina y una Medalla de Oro en Mundus Vini, en Alemania.
Estos premios reconocen el compromiso de Casa Madero con la excelencia y consolidan la posición de México como un país destacado en la viticultura.
Actualmente, la vinícola produce alrededor de 200 mil cajas anuales, abasteciendo tanto al mercado nacional como a destinos de exportación, incluyendo Suiza, Japón, Estados Unidos y España.
Cada botella se elabora con uvas propias cultivadas en sus 400 hectáreas de viñedos, ubicados estratégicamente en un área fértil dentro del desierto de Coahuila.
Casa Madero es reconocida no solo por la calidad de sus vinos, sino también por su historia de perseverancia y adaptación.
Con una visión de largo plazo, los hermanos Milmo planean continuar innovando y afianzando la presencia de la vinícola en el mercado global, destacando el potencial del vino mexicano en la escena internacional.
La meta es consolidar un legado que inspire y que mantenga viva la herencia vinícola de la región para las futuras generaciones, mientras eleva la percepción del vino nacional en el mundo.
