Pareciera que la Inteligencia Artificial (IA) es algo relativamente nuevo; con la introducción de nuevos programas ésta se volvió viral y hoy en día está al alcance de cualquier persona de una manera tangible. Sin embargo, este concepto surge por primera vez en los años 40s con Alan Turing y se acuña en 1956 por John McCarthy; aunque últimamente, este tema se ha acelerado de manera exponencial.
En este sentido, la transformación digital se está convirtiendo en una fuerza que está remodelando radicalmente la forma en que trabajamos, interactuamos y nos desenvolvemos en el entorno laboral. La llegada de sistemas como IA Generativa GPT-4, que crea textos en segundos, ha sido un parteaguas generacional, catapultando la IA al centro de atención de empresas y trabajadores, quienes buscan entender cómo esta tecnología puede integrarse en sus realidades laborales.
Inteligencia Artificial en el entorno laboral en México
De acuerdo con el estudio elaborado por WeWork y PageGroup, “Retos y perspectivas del trabajo”, el 48% de los mexicanos ya están utilizando la IA en su vida diaria, por lo que se observa una transformación significativa en la forma en que los colaboradores interactúan con esta tecnología en el entorno laboral. Este crecimiento exponencial de profesionales que dominan el uso de la IA en las organizaciones refleja la creciente demanda de habilidades relacionadas con la IA en el mercado laboral.
Del mismo modo, WeWork afirma que la inteligencia artificial implementada correctamente puede ayudar a aumentar la productividad de los colaboradores, al hacer más eficientes algunos procesos, y, según datos de esta empresa, el 78% de las personas afirma haber ganado mayor rendimiento con las diferentes herramientas de esta tecnología.
¿Qué cambios ha traído consigo la IA a las empresas?
Por otro lado, la rápida adopción de la IA ha llevado a una transformación, tanto gradual como repentina en los lugares de trabajo. Aunque algunas empresas han adoptado la IA de manera progresiva durante varios años, otras han tenido que implementarla de manera más rápida en tiempos recientes. Esta rápida integración ha llevado a un aumento en la inversión en talento especializado en IA y en el número de laboratorios de IA, calculándose alrededor de 60 en todo el mundo, liderados por empresas como Meta, Google, IBM y Microsoft.
Además, se ha demostrado que son los jóvenes los que están utilizando más la inteligencia artificial para sus trabajos. En un análisis generacional hecho por WeWork y PageGroup, los Centennials ya han adoptado la IA en un 60% de sus colaboradores, el 50% de los Millennials y el 41% de la Generación X. Esto se debe a que los Centennials ya son una generación con menores barreras para la adopción de tecnologías.
Principales retos e implicaciones de esta tecnología
Sin embargo, el camino hacia la adopción generalizada de la IA no está exento de desafíos. Uno de los mayores obstáculos es el riesgo de fuga de información confidencial. Las herramientas de IA a menudo se alimentan de contenido compartido e ingresado, lo que podría resultar en la revelación de datos internos de la empresa en caso de eventualidades.
Asimismo, aunque el 94% de los encuestados ven la IA como algo positivo para el mercado laboral por los beneficios en la productividad, existe la preocupación de que la automatización impulsada por la IA pueda llevar a la pérdida de empleos y a la desigualdad económica, no tanto por ser reemplazados por un robot, sino por no poder competir con las habilidades técnicas que la tecnología ofrece. Las tareas repetitivas y rutinarias son las más susceptibles a la automatización, lo que podría afectar a una amplia gama de industrias y roles laborales.
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No obstante, a pesar de este panorama retador, el 21% de los mexicanos encuestados por WeWork creen que es importante comenzar a incorporar estos avances en sus lugares de trabajo, a pesar de tener miedo de las implicaciones en el futuro.
Datos de la misma encuesta, revelan que el 28% no utilizan la IA por falta de conocimiento, por lo que es necesario aumentar los programas de reconocimiento y educación tecnológica para poder aprovechar esto de mejor manera.
La inteligencia artificial, si bien, representa una gran oportunidad para las empresas y los colaboradores, automatizando tareas y mejorando la productividad, los retos a los que las empresas se enfrentan son importantes, como puede ser una fuerte inversión en ciberseguridad y en campañas de sensibilización. Es vital considerar cuáles son los beneficios y los riesgos de utilizar esta tecnología y cómo podemos mitigar estos riesgos para aprovechar al máximo su potencial.
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