Tener claro desde los 10 años que se quiere hacer algo al respecto para combatir el cambio climático no se da en cualquier persona. Mientras hay niños y niñas que piensan solo en ir a la escuela o jugar con sus amigos, otros planean cómo generar conciencia para cuidar el medio ambiente. Tal es el caso de Viviana Álvarez de la Cadena, fundadora de Salvemos al Planeta, quien actualmente estudia Bachillerato Internacional en la Universidad de Monterrey.
Poco a poco reflexionó sobre cómo el parque que estaba cerca de su casa se estaba deteriorando, y si así estaba ese, ¿cómo estarían los demás? ¿Cómo se encontraría el mundo? Estas eran algunas de las preguntas que se hacía y le despertaban esa inquietud por hacer algo.
Otro factor que inspiró a Viviana Álvarez fue la lectura, ya que así es como aprendía de diversos temas. Un día leyó sobre el excesivo consumo humano y el impacto en el medio ambiente a tal punto que se sintió afectada. Su primera idea era regalar un árbol a las personas que fueran al Parque de Los Patos (actualmente El Capitán, en Fuentes del Valle) para que lo cuidaran y quienes lo hicieran de forma correcta recibieran una recompensa. Sin embargo, ella quiso ir más allá.
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“Me puse a pensar qué cursos había tomado y qué temas sentían que eran importantes para el cuidado del medio ambiente, entonces desarrollé uno con se iban a ver seis diferentes tópicos relacionados con la ecología”, explica la joven. Después de presentar este proyecto en Secretaría de Desarrollo Social en San Pedro en el verano de 2015, fue invitada a impartirlo en la colonia Plan de Ayala; sin embargo, no quiso apresurar las cosas.
Aprovechando que coordinaba un grupo de Niños en Acción, participó en la convocatoria del Niño Emprendedor. Después de recibir el premio en noviembre de ese mismo año, el cual era un patrocinio y la asesoría por parte de dos alumnos de la UDEM, arranca con el proyecto Salvemos al Planeta.
Entre los principales ejes de acción de este proyecto se encuentran el curso, el voluntariado donde los niños pueden pintar y plantar árboles como parte de un programa de reforestación de áreas verdes.
De igual manera, Salvemos al Planeta colabora con otras asociaciones como las Madrinas de San Pedro para impulsar iniciativas en conjunto.
Las ganas de aprender pueden salvar al mundo
La influencia positiva puede venir de cualquier parte o persona, en el caso de Viviana, esta se dio gracias a sus abuelos maternos, ya que en su casa tenía una biblioteca con la cual tuvo acceso a libros.
Estas ganas de aprender la llevaron a informarse sobre todo lo referente al cambio climático a fin de resolver dudas que la inquietaban.
Hoy, Viviana mantiene su compromiso por generar consciencia respecto al cuidado del medio ambiente, en una ciudad aquejada por la falta de agua y altas temperaturas, entre otras problemáticas referentes al ecosistema ambiental.
“Empecé con esta iniciativa en el 2015, un día en la noche estaba acostada y me puse a pensar en la vida”, comenta Viviana Álvarez.