Detrás de cada película y serie hay una figura esencial que, a menudo, pasa desapercibida: el productor. La multifuncionalidad ha transformado a este rol en un misterio de la industria ¿qué es o qué hace?
Pablo Cruz, productor con una destacada trayectoria en proyectos como ‘Luis Miguel: La serie’, ‘¿Quién lo mató?’ y ‘Miss Bala’, relata para Players of Life el camino del productor y cómo se llega a proyectos exitosos, formar parte de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas o crear una exitosa casa productora como ‘El estudio’.
El camino del productor
Pablo Cruz inició su camino en la producción cinematográfica desde etapas escolares. A pesar de tener un máster en fotografía de cine, durante su paso por la escuela descubrió que el rol de productor era un área poco explorada, aunque crucial para el éxito de cualquier proyecto.
"Cuando llegué a la escuela, nadie quería ser productor", comenta.
En lugar de seguir el camino de los directores o guionistas, Pablo asumió esa responsabilidad y se fue involucrando cada vez más en la producción. Desde sus primeros cortos, su futuro estaría en esa área.
“Al principio, era el que levantaba la mano cuando faltaba un productor, y así fue como me metí en este mundo”, comenta.
¿Qué Hace un Productor?
El productor es una figura fundamental en el cine, responsable del equilibro entre la visión creativa del proyecto y los aspectos logísticos, financieros y operativos.
Aunque el productor no es el que escribe el guion o dirige a los actores, juega un papel crucial al guiar la ejecución del proyecto, asegurando que las ideas creativas sean viables y se concreten de forma efectiva.
"La labor del productor es poner la lógica en el caos creativo", dice Cruz.
Además de gestionar los aspectos prácticos del proyecto, el productor también es un “primer público”. Su trabajo consiste en cuestionar si la propuesta tiene el potencial de atraer al público adecuado y si es viable en términos de presupuesto y recursos. Es un rol que requiere tomar decisiones difíciles, como en la elección del elenco, las locaciones o la gestión de los recursos disponibles.
La Profesión Invisible
A pesar de su importancia, el productor es una figura frecuentemente invisible en la industria. Mientras que los directores y actores suelen acaparar los reflectores, el productor suele caer en un limbo extraño.
“Todavía le tengo que explicar a mis hijos qué hago", confiesa .
Sin embargo, resalta que la ausencia de un buen productor puede ser catastrófica para cualquier proyecto.
“Cuando no hay productor, las cosas se desmoronan”, explica.
Sin alguien al mando de los aspectos logísticos, los recursos se desperdician y el proyecto puede ser un rotundo fracaso, a pesar del talento creativo involucrado. Por ejemplo, a veces un director o guionista sin el respaldo adecuado puede cometer errores como sobrepasar el presupuesto, elegir el elenco equivocado o malgastar recursos en equipos innecesarios.
Instinto y Responsabilidad
Para Pablo Cruz, una de las habilidades más importantes de un productor es el instinto. Este instinto le permite leer a las personas, reconocer oportunidades y decidir cuándo un proyecto tiene potencial para ser un éxito.
“Ser productor es saber cuándo acelerar o frenar el proceso creativo”, afirma.
Aunque algunos aspectos de la producción, como las finanzas o la logística, se pueden aprender, la habilidad para identificar qué ideas funcionarán a largo plazo y cuáles no es algo que depende del instinto personal del productor.
También asume una gran responsabilidad, no solo en términos de gestión del proyecto, tiene que ser capaz de equilibrar las expectativas del director con la viabilidad del proyecto y garantizar que todo el proceso se desarrolle de manera eficiente
Aunque los directores y guionistas pueden estar involucrados en tiempos específicos del proyecto, el productor se mantiene desde su inicio hasta su entrega al público.
TE RECOMENDAMOS | María Rodero: Entre Viñas y Vinos en Ribera del Duero
Detrás de Luis Miguel y Cochochi
Pablo, destaca dos proyectos que han dejado una huella especial en su carrera; Luis Miguel: La serie y Cochochi; son dos de los más significativos, de escalas diferentes y con públicos diferentes.
Luis Miguel: La serie es uno de los proyectos de mayor alcance en los que Cruz ha estado involucrado. A pesar de su alto perfil comercial, Cruz valora la complejidad de la historia y el desafío que representó producir una serie biográfica sobre una figura tan icónica como Luis Miguel.
“Es un proyecto que conecta con la gente de manera profunda, y eso, para mí, es muy gratificante", comenta.
El éxito de la serie le permitió equilibrar la creatividad con la audiencia masiva, un reto que disfrutó y le permitió ampliar su visión como productor.
Por otro lado, Cochochi, una película independiente del 2007, destaca por su valor artístico y cultural. Esta historia sobre dos niños de la Sierra Tarahumara fue una de las decisiones más gratificantes de Cruz.
“Aunque sabíamos que no sería un éxito comercial, Cochochi me permitió involucrarme en una historia única, y creo que fue una de las mejores decisiones que tomé”, afirma.
Detrás de ‘El estudio’
Pablo Cruz, es también el CEO de ‘El estudio’, casa productora dedicada a la creación y desarrollo de proyectos cinematográficos y televisivos.
Con presencia en México, España y Argentina, Cruz y su equipo se enfocan en ser el “catalizador” de las ideas, involucrándose en todas las etapas del proceso creativo
El origen de El Estudio se remonta a la disolución de Canal, la empresa donde Cruz trabajó antes de asociarse con dos productores de confianza. Juntos, decidieron fundar una productora con una visión más global, involucrando a los tres países hispanohablantes para crear contenido de mayor alcance.
El Estudio nació con la llegada de la pandemia de COVID-19 en 2020. Aunque las restricciones afectaron la producción, Cruz señala que la pandemia aceleró el consumo de contenido, especialmente a través de las plataformas de streaming.
“La demanda de contenido creció como nunca antes, lo que nos permitió desarrollarnos en un entorno de alta demanda”, explica.
A pesar de los retos para filmar, el equipo aprovechó el tiempo para desarrollar nuevos proyectos.
En cuanto al futuro del cine y las series, Cruz observa que las series han ganado terreno por su mayor duración y mayor inversión.
Sin embargo, tanto las películas como las series siguen teniendo un buen desempeño en las plataformas. Aunque el cine ha sufrido una caída en taquilla, Cruz tiene esperanza en la recuperación, especialmente en México.
Formar parte de La Academia
Pablo Cruz forma parte del comité de productores de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas.
Explica que ser parte de la Academia fue un proceso que ocurrió sin que él lo supiera, probablemente mediante una propuesta de su nombre y una posterior votación.
Cruz está en el “branch” de productores, que está compuesto por profesionales de cada continente, y su labor es elegir a nuevos miembros de la Academia.
"Es una locura, un honor increíble", afirma sobre la invitación que recibió.
Cruz valora el cambio que la Academia está experimentando al convertirse en una institución más global, buscando la inclusión de profesionales de todo el mundo, más allá de Estados Unidos. Destaca que, aunque existen academias de cine en Europa, ninguna tiene el poder ni el prestigio de la Academia estadounidense.
Este enfoque inclusivo permite a países como México tener una representación importante dentro de la Academia, algo que considera fundamental para el futuro del cine global.
Además, Cruz disfruta de las interacciones con otros miembros, muchos de los cuales han ganado premios Oscar. Para él, la experiencia es enriquecedora, especialmente cuando comparte su visión con profesionales de otras culturas y mercados cinematográficos.