Sonia Garza González
Presidenta nacional de la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresa (AMMJE), consejera nacional de COPARMEX, de COPARMEX NL y de CAINTRA NL
A estas alturas del siglo XXI, estamos conscientes de que la innovación y el cambio tecnológico comprenden una transformación profunda que está redefiniendo la vida de la humanidad.
El progreso tecnológico permite avances sin precedentes, capaces de mejorar los resultados sociales, económicos y políticos. No ignoremos que el aislamiento en los hogares por la pandemia aceleró el uso de las soluciones digitales para seguir nuestro trabajo, estudios, relaciones, negocios y demás actividades, siendo justo el comercio electrónico el que mostró un considerable aumento.
Así, cada vez más personas compran, venden o intercambian bienes, servicios e información a través de internet, correo electrónico o páginas web, y realizan su pago en línea.
Una alterativa para que las mujeres hiciéramos frente a esta situación fue precisamente el emprendimiento mediante herramientas tecnológicas, ofreciendo todo tipo de artículos a través de Facebook, Instagram o WhatsApp, como ropa y comida, entre otros.
De acuerdo con el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM, las emprendedoras digitales dedican prácticamente los siete días de la semana para el desarrollo de su negocio; y aun cuando operan en la informalidad, generan cerca de 9.5 millones de pesos al día en ventas que llegan a 13 millones de hogares.
Por otro lado, las mujeres compramos más por internet. Según un estudio de 2021 sobre comercio en línea, de la Asociación Mexicana de Venta Online, el 53% de las personas consumidoras por esta vía era del sexo femenino, en contraste con el 47% de hombres.
Con estos datos pretendo resumir que en el mundo hiperconectado en el cual vivimos, la tecnología pone al alcance de cualquiera la posibilidad de presentar una empresa con una inversión infinitamente menor y a muchísima más velocidad, en comparación con algunos años atrás.
A las emprendedoras les diría que si ya dieron el primer gran paso para iniciar un negocio, hagan de la tecnología su gran aliada.
Tenemos a nuestro alcance una gran plataforma de conocimiento, de acceso a herramientas que pueden facilitarnos las cosas para exponer lo que vendemos.
Quedarse al margen del uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) implica no aprovechar las enormes ventajas que dichas herramientas proporcionan en materia de información, comunicación, educación, capacitación, gestión, emprendimiento, transacción, posicionamiento y relaciones, entre otras dimensiones.
Nos puede resultar difícil usar adecuadamente las herramientas tecnológicas, pero justo las mujeres somos un sector muy importante en el comercio digital. Aprovechemos esta gran oportunidad…
