Apasionado de la familia, del mundo empresarial, de las organizaciones en general y de la buena vida interior, Guillermo Dillon, quien estuvo al frente de la dirección de la Cámara de la Industria de Transformación (Caintra), terminó su etapa después de 21 años. En retrospectiva, el líder recuerda que su ingreso en la Cámara estuvo marcado por dos factores clave para el éxito: la escucha activa y la suma de voluntades.
Con ironía, menciona “me pagaban por tener juntas”, pero su responsabilidad radicaba en escuchar a cada uno de los comités que integran la asociación y generar propuestas que velaran por los intereses de todos y cada uno de los integrantes, y de la sociedad en general. Dirigida por Guillermo Dillon, Caintra se ha posicionado como una de las cámaras empresariales más influyentes y de renombre.
Respecto del gran crecimiento, Dillon menciona que la comunidad empresarial de Monterrey tiene un gran nivel de generosidad, compromiso, entrega y entusiasmo, y fue un honor servirla. Su papel fue el de un facilitador del dinamismo, la capacidad y el profesionalismo que caracteriza a la comunidad.
NÚCLEO FAMILIAR
Estar al frente de la asociación le permitió vincularse con otras organizaciones en Estados Unidos. Cada año, asistía a convenciones de todo tipo: empresariales, filantrópicas, profesionales, entre muchas otras. Disfrutaba de conocer distintas iniciativas e inspirarse para generar ideas para Caintra, pero estar en contacto con tantas y tan diversas asociaciones le ayudaron a plantearse algo: en México había organizaciones casi para todo, pero no conocía alguna que estuviera pensada en fortalecer la familia.
Después de pensarlo mucho, tuvo varias ideas que decidió poner en práctica: crearía algo que impulsara este objetivo. Así, durante dos años, trabajó en la creación de la revista Aventura familiar, que se convertiría en el primer producto de la asociación Núcleo Familiar. “Aventura familiar fue un sueño, un proyecto que se materializó hace casi seis años, cuando creamos esta asociación civil sin fines de lucro, cuya esencia es fortalecer matrimonios y familias a través de contenidos positivos: gotitas de mensajes básicos y fundamentales”, comparte Guillermo Dillon.
DENTRO DE CASA
Guillermo Dillon se sabe afortunado de haber crecido en una familia favorecida no solo en términos económicos, sino en cuanto al amor, tiempo, cariño y cercanía de los que la conforman. “Uno no puede menos que tratar de hacer lo mismo hacia los hijos y la esposa, y los nietos que vendrán después”, menciona.
Hubo un momento en que las vacaciones eran sinónimo de roadtrips en su camioneta: sus seis hijos, su esposa y él recorrían grandes distancias. Hoy sus hijos han crecido y solo tres de ellos viven en Monterrey. Aunque la dinámica es muy distinta, la unión continua: los fines de semana se reúnen para hacer caminatas, subir la montaña, cocinar juntos, ir de pesca o ver deportes por televisión.
El exdirector de Caintra está agradecido con Dios, su familia, colaboradores y toda la comunidad industrial que lo acompañó durante su carrera. ¿El futuro? Seguir activo, generar valor y compartir las enseñanzas que por tanto tiempo ha adquirido.
CLAVES DE SU LIDERAZGO
· CLARIDAD
· CONSISTENCIA
· PERSEVERANCIA
· ESCUCHA
· SUMA DE VOLUNTADES
ANTES Y DESPUÉS EN CAINTRA HACE 21 AÑOS
· 1900 AFILIADOS
· 40 COLABORADORES
· 20 MDP DE PRESUPUESTO ANUAL
HOY
· 4000 AFILIADOS
· 150 COLABORADORES
· 900 MDP DE PRESUPUESTO ANUAL