Ernesto Garza Guerra, conocido como Neto, recuerda que Rafael Ábrego, directivo de la PrepaTec a quien considera su primer mentor, le dijo un día: “Sé bueno en algo y enfócate”. Al explorar sus dotes como creador, emprendedor y vendedor, tomó esa ruta y hoy está al frente de Hager Krig Ventures, grupo que abarca nueve empresas.
“Me gusta detectar oportunidades y analizar a profundidad los negocios”, dice Neto, quien a sus 40 años se asume como emprendedor serial.
Del 2018 a la fecha han sido los años más intensos en su faceta de emprendedor, al participar en una veintena de proyectos como fundador, socio, inversionista o consejero.
“Me gusta impactar en mi círculo”, señala.
Destacan la fintech Kontempo, una empresa que ofrece software como servicio para pagos, créditos y cobranza, donde funge como City Manager Monterrey y consejero. Además cofundó Futuro Talento, una bolsa digital de trabajo enfocada en prácticas profesionales para talento joven.
También está Frictionless Inc, una aceleradora de startups de tecnología basada en Austin, Texas, que ayuda a empresas latinoamericanas de nueva creación a entrar a Estados Unidos, levantar dinero y capturar valor en la zona.
Poco antes de la llegada del COVID-19, Ernesto Garza se propuso dedicar de 30 a 40 horas semanales para apoyar con consultorías, sin pago de por medio, a sus amigos y conocidos emprendedores. El aprendizaje que obtiene, dice, es gratificante.
“Con mis socios, o con los emprendedores a los que apoyo, mi compromiso es dedicarles cinco horas a la semana, para ayudarles en relaciones públicas, ventas, desarrollo de producto o mentoreo”, dice.
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RIGOR Y DISCIPLINA
Diagnosticado con hiperactividad de niño, sus padres encaminaron esa energía hacia el deporte, los libros y nuevos aprendizajes.
Estudió Finanzas en el Tecnológico de Monterrey, con beca deportiva por ser integrante de Borregos. Recién graduado trabajó en la Prepa Tec Santa Catarina, como Director de Asuntos Estudiantiles y paralelamente cursó un MBA de doble titulación en la EGADE-University of North Carolina at Charlotte.
En el 2011 realizó el Máster in Prospective and Strategic Studies en la EGADE y el Master en Public Policy Analysis en Harvard University. Un año más tarde, estudió en la Universidad Autónoma de Barcelona el Máster in International Business Management.
Previamente, cumplió su sueño de trabajar en el extranjero, contratado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con su sede en París, Francia. Regresó a México para integrarse a Grupo Topaz, en la plataforma educativa Talisis, donde desempeñó diferentes cargos directivos durante más de una década.
MÁS ALLÁ DE LAS EMPRESAS
Además de su labor como empresario, participa en asociaciones y organizaciones no gubernamentales. En broma, su esposa Ceci, con quien se casó hace 10 años y tiene tres hijos, le comenta que si el día tiene 24 horas, él busca la manera de extenderlas a 60.
Con una avidez por el conocimiento, Neto recuerda que, en su primera entrevista de trabajo, le preguntaron a qué le tenía miedo en la vida. Él respondió: a ser obsoleto. Aún hoy, piensa lo mismo.
“Por eso es aprender, por eso es ayudar, por eso es escuchar, por eso es crear incansablemente”, agrega.
En el 2022 hizo una pausa para realizar una estancia de tres meses en la Stanford University Graduate School of Business, donde cursó un programa ejecutivo.
“Siempre me estoy actualizando, me gusta mucho estudiar porque más allá de los libros, aprendes mucho de tus compañeros y sus experiencias”, añade Ernesto Garza
APROVECHAR EL DÍA
Mucho antes de que Robin Sharma publicara su libro “El Club de las 5 de la mañana”, donde ofrece consejos sobre cómo aprovechar las primeras horas del día para mejorar la productividad y el bienestar personal, Neto adoptó el hábito de madrugar.
“Siento que si duermo mucho, que por naturaleza no lo hago, pierdo el día”, asegura.
Donde quiera que se encuentre, invariablemente abre y cierra el día desde su computadora, para aterrizar pendientes de trabajo y personales. No hay manera que esto no ocurra, así se encuentre en medio de una fiesta entre amigos.
“Esa disciplina me la dio mucho el fútbol americano y estoy eternamente agradecido con eso”, dice.
Opina que, para un emprendedor, saber cuándo dejar ir es uno de los principales retos.
“Entender que no todo es para siempre, que un negocio te dejó aprendizaje, te dejó flujo o te puso en el nivel para abrir el siguiente”, asegura.
Y es que oportunidades siempre habrá. Ya lo dijo el escritor Ralph Waldo Emerson: “Cada pared es una puerta”. Así en la vida y en los negocios.
