La misión Artemis de la NASA está a punto de hacer historia al enviar a la primera mujer y la primera persona no blanca a la Luna.
Sin embargo, el verdadero reto vendrá en la siguiente fase de esta ambiciosa misión: llevar a la humanidad a Marte.
Con un viaje de tres años de ida y vuelta, la alimentación de los astronautas se convierte en un desafío crucial, especialmente en lo que respecta a la proteína, un nutriente esencial para su salud y bienestar. Conoce todos los detalles en voz de Eneko Axpe, gastrofísico vasco encargado del desarrollo de alimentos para esta misión para Players of Life.
¿Cómo será la alimentación en la Misión Artemis?
En un entorno donde no es posible criar animales, como una vaca, se necesitan fuentes de proteínas que sean eficientes, de rápido crecimiento y que requieran pocos recursos.
Aquí es donde entran en juego los micelios, las estructuras subterráneas de los hongos.
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Estos organismos pueden llegar a tener un contenido proteico del 41%, lo que los convierte en una fuente potencialmente vital para las misiones espaciales de larga duración.
Eneko Axpe, gastrofísico vasco que colabora con la NASA explica a Players of Life que ha trabajado en la investigación con micelios extremófilos, hongos que crecen en condiciones extremas como altas temperaturas, niveles elevados de acidez y presiones inusuales, condiciones que se asemejan a las del espacio.
Estos micelios no solo tienen un alto contenido en proteínas, sino que también requieren cantidades mínimas de agua y no necesitan tierra para crecer, lo que los hace ideales para el entorno limitado de una nave espacial.
¿A qué sabe la comida espacial?
A pesar de su eficiencia, Axpe y el equipo de la NASA ha enfrentado un reto significativo: el sabor. Hasta ahora, los micelios que han desarrollado no son particularmente agradables al paladar.
Sin embargo, se están realizando esfuerzos para mejorar las propiedades organolépticas de estos hongos y hacer que sean más atractivos para el consumo a largo plazo.
La alimentación sostenible será una piedra angular en el éxito de la misión Artemis y los futuros viajes a Marte. Y los micelios podrían ser la clave para garantizar que los astronautas se mantengan sanos y bien alimentados durante estos largos y desafiantes viajes interplanetarios.
