“Huella o señal que deja una fuerza aplicada en algo”. De acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española, esta es una de las distintas acepciones de la palabra “impacto”.
Si este término lo asociamos con dos mujeres que, desde sus trincheras, han encontrado el triunfo y dejado huella a su alrededor, encontramos a gente como Olimpia Cabral y Galia Plasencia.
Cabral, directora comercial de marketing y comunicación de Chivas; y Plasencia, directora general de Lacrin, son ejemplos vivos de un impacto muy positivo que las mujeres han ido logrando en el campo laboral en México.
“Quien sea esa mujer que está logrando tener un impacto positivo en su entorno es porque está haciendo las cosas bien, porque está saliendo, porque está allá afuera; si estamos impactando en las personas, en la sociedad, es porque estamos creando algo”, dice Galia.
“Para mí es muy importante que las mujeres cada vez entendamos mejor de qué somos capaces, que seamos conscientes del poder que tenemos, de la seguridad y de la luz que generamos a nuestro alrededor”.
Y de ese impacto, de esa influencia, es que ambas, Olimpia y Galia, platicaron con nosotros, para dejar en claro que cada vez hay más mujeres que impactan en la sociedad. A ellas se dedica esta edición.
Olimpia Cabral, en la cancha más bonita
Dos etapas como directora de marketing en Chivas han llevado a esta mujer a romper el techo de cristal.
Olimpia Cabral lleva en el nombre su inclinación por el deporte. Ha desarrollado su actividad empresarial en este ámbito en dos etapas como parte de la organización de las Chivas, con el cargo de directora de marketing.
“He estado en el maravilloso mundo del deporte desde la cancha más bonita. Si bien, todo el mundo nos centramos en la cancha deportiva, a mí me ha tocado estar en el área de comunicación marca y negocio, que tiene que ver con las emociones, con los tiempos, con la marca, con todo lo que genera este vestido alrededor del deporte”, expresó la directora.
“No solamente en futbol, he participado en muchos otros proyectos que tienen que ver con deporte, con la sociedad, con la parte política. Mi formación, desde que tenía 25 años, empieza mucho más en la parte institucional corporativa, aunque realmente las bases de mi formación se las debo, sin duda, a mi papá”.
Olimpia recuerda que en el negocio familiar empezó a tener responsabilidades que la fueron guiando en la vida laboral, adquiriendo las capacidades y competencias requeridas para destacar con liderazgo y visión empresarial.
La aventura en el negocio familiar siguió adelante hasta que Olimpia emprendió el vuelo y llegó a trabajar a la que considera su primera experiencia en una gran corporación.
“La primera empresa que a mí me da forma, ya en un mundo mucho más corporativo y de grandes alcances, es Drypers, una compañía de higiénicos desechables, donde era parte de un corporativo con presencia en más de 10 países. Se abrió para mí un mundo global, para entender cómo son las marcas en otros países”, expresó.
“Ser parte del equipo internacional de marketing me permitía tener este contacto con otras culturas, con otras formas, otras herramientas”.
El futbol toca la puerta
Luego de ese paso por Drypers, Olimpia tuvo la oportunidad de trabajar en el mundo deportivo, al incorporarse al Club Deportivo Guadalajara, que había sido adquirido, en octubre de 2002, por Jorge Vergara, empresario tapatío fundador de Omnilife.
“En Drypers, quien era la directora de Recursos Humanos, se fue a Omnilife, y un día me llamó para decirme: ‘Oye, fíjate que mi jefe acaba de comprar el equipo de las Chivas y está buscando a una persona para dirigir el área de mercadotecnia. ¿Te gustaría venir al futbol?’”, comparte Olimpia.
Y tras esa llamada, llegó para Olimpia un periodo en el que el apoyo incondicional de Vergara, y más adelante de Juan José Frangié, la marcaron de manera positiva.
“Jorge compró a Chivas en 2002, y yo llegué en el primer trimestre de 2003. Llegué reportándole al director comercial, un argentino. A los tres meses se fue Christian, y yo, siendo nueva en la industria, nueva en un monstruo de negocio, que hoy entiendo mucho mejor que en aquel tiempo… Jorge, que era un visionario y siempre empujaba a gente joven y nuevos talentos, me marcó un día, y me dijo: ‘Oye, ya sabes que tu jefe se va en media hora, ¿verdad?’. Ya estaba el run-run en el pasillo. ‘Sí, sí estoy enterada’. Entonces me dijo: ‘Bien… pues vas. Te quedas como directora comercial’. Y yo aterrada”.
A pesar de ese terror, Olimpia agradeció la confianza y correspondió a Vergara con un gran desempeño, a pesar de que ella se consideraba novata en el mundo de las patadas.
“Jorge Vergara era un fuera de serie y tenía una forma única de gestionar el talento. Vivía años luz adelante, y había que entenderle, pero costaba trabajo. Había que seguirle el ritmo, pero eras privilegiado de que él pudiera identificar algo en ti, porque entonces te obligaba a ir para allá”.
“Otro, es Juan José Frangié, gran amigo. Fue mi jefe en algún tiempo. Él llegó como dos años después de mí a Chivas. Fue mi sensei, fuimos socios. Luego, después de que salimos de Chivas, nos asociamos con una empresa que se llamaba Brand Business Builders; ahí manejábamos negocios deportivos, también empresariales”, dijo Olimpia.
Mujeres que inspiran
Pero Olimpia no sólo se ha visto influida por Vergara y Frangié, también hubo dos mujeres que la inspiraron.
“Creo que, en el origen, por allá en mis 20, yo decía: ‘Quiero ser como esta mujer’. Graciela Picazo, quien fue la directora comercial de Drypers, chilanga, con mucho mundo y una mente muy abierta, muy estructurada, muy echada para adelante, muy sin miedo. Yo rescato de ella, precisamente, ese sentimiento de decir: ‘Sin miedo, yo puedo’. Con todos los retos que las mujeres tenemos en el mundo en posiciones altas, porque hay que pelearlas, porque son más cuestionadas”.
“Hoy día, ¿quién me inspira? Fernanda Sáenz, la chief del área comercial y de negocio de Caliente. Una mujer brillante, estructurada, segura… siempre está queriendo crear su obsolescencia para dar un paso adelante. Sin duda, ella me inspira”.
¿Qué le diría a Galia?
Para esta sesión, pedimos a Olimpia que le diera algunos consejos o le dedicara algunas palabras a Galia Plasencia. Esto es lo que le dijo:
“Te felicito, de verdad, por esa forma de expresar lo que es una mujer en su esencia, en su naturaleza, en sus ganas de conformar, de empujar, de inspirar, de hacer, de responsabilizarse, de crear, de evolucionar… qué padre”.
“Con esta energía, con esta juventud, con estas ganas que tienes de seguir inspirando… no las sueltes, que muchas más chavitas te sigan escuchando, emprendiendo y yendo hacia adelante”.
Frases:
- “Nunca pensé que iba a acabar tan enamorada de esta industria maravillosa”.
- “La siguiente década quiero seguirla rompiendo, quiero seguir haciendo cosas”.
- “Puedes ser una mamá, cuyo centro de su vida sean sus hijos, sin que eso impida que seas una gran empresaria, una gran emprendedora”.
Olimpia Cabral / Estilo Players
Restaurante favorito:
- La I Latina
Platillo favorito:
- Buey tailandés
Destino de viaje:
- Madrid
Galia Plasencia, en apoyo a las mujeres
Amazona, madre y llena de ingenio son algunas formas de describirla
El amor por los caballos y el medio ambiente llevó a la tapatía Galia Plasencia a desarrollar productos de cuidado e higiene para equinos, mismos que con el tiempo fueron evolucionando, hasta convertirse en una línea completa también para consumo humano.
“La empresa surgió de mi pasión por los caballos. Yo siempre he montado… bueno, no siempre, desde los 16 años más o menos. Mi papá toda la vida estuvo en el mundo ecuestre, yo en ese entonces tenía una agencia de mercadotecnia. Me enfocaba al desarrollo de nuevos productos, era mi fuerte, y de ahí me surgió la idea de crear un producto”, recuerda Galia.
“Siempre tuve el sueño de crear algo tangible, de desarrollar, junto con un cliente, un repelente 100 por ciento natural para caballos, un repelente de moscas. Hicimos un análisis de mercado, y no había ningún producto mexicano 100 por ciento natural. Vimos ese potencial y lo desarrollé”.
El uso de citronela y otros productos de origen natural permitieron que esta marca fuera aceptada en el mundo ecuestre, y así surgió la empresa de Galia.
“Salió la marca Lacrin. Lo hice junto con una chavita que me ayudaba en la empresa. Y, bueno… finalmente surgió un repelente 100 por ciento natural, hecho a base de citronela, para caballos. Esto fue hace aproximadamente siete años”.
En sus inicios, Galia distribuía bidones de repelente en los ranchos de la región, y empezó a ver la opción de generar más productos.
“Entonces me dedicaba a subir los bidones a la caja de mi camioneta y repartirlos en ranchos. Empezó a crecer la empresa, a posicionarse la marca, desarrollamos un acondicionador y los tres champús”, dijo Galia.
Estos champús tienen una particularidad de unir al mundo equino con el humano
“La fórmula de los tres champús me la desarrollan los mejores químicos de México, gracias a un amigo de la familia. Me dijo: ‘Esta fórmula es prácticamente un mega ultra champú; si en algún momento lo quieres explotar para humanos… es un mega champú. El pH del caballo y el del ser humano son iguales, así que podemos utilizar los mismos productos de uso tópico sin que generen ningún tipo de alergia ni reacción’. Saqué la línea, los cinco productos y fuimos creciendo. Cerré la agencia, porque ya no podía con las dos empresas, y me dediqué 100 por ciento a Lacrin”, comentó.
Ya con este desarrollo del champú, Galia posiciona la marca en diferentes actividades ecuestres, como campeonatos de polo, charrerías y concursos de salto. La empresa fue progresando y dando, además, oportunidades a otras mujeres.
Aparece en Shark Tank México
“Un buen día, salí en Shark Tank. Me gusta mencionarlo porque fue un parteaguas para la empresa. Salir en el programa me dio una exposición mediática muy bastante interesante. Después de esto, la gente nos empezó a buscar muchísimo. Fue cuando desarrollamos una fórmula de negocio con la cual apoyamos a las mujeres: se inscribían como distribuidoras de nuestros productos y ganaban bonos, margen y comisiones”.
“Así fue creciendo este grupo de mujeres que nos empezaron a apoyar con la distribución, y, de repente, nos dimos cuenta de que ya vendíamos más para humanos que para caballos, así que reinventamos la empresa. Fue, prácticamente, empezar desde cero”, expresó.
Para llegar a esa reinvención, Lacrin se apoyó en la fe de aquellas personas que distribuían la marca.
“Yo aprendí mucho de Jorge Vergara, quien me coacheó en algún momento… un gran ser humano… Me dijo que era una fórmula muy buena para crecer, y crecer al lado de miles de personas que creyeran en el proyecto. Y es que, cuando hay muchas personas creyendo en tu proyecto, puedes lograr grandes cosas”.
“La intención era tener este approach con las mujeres. Ellas me buscaban y me decían: ‘Quiero distribuir tus productos’. Yo quería una fórmula con la que las dos nos beneficiáramos tanto, que pudiéramos apoyar a las mujeres que buscan un ingreso, y al mismo tiempo mantener la casa”.
Actualmente, Lacrin se distribuye como champú de consumo humano en La Comer, Chedraui, Sally Beauty, Liverpool, Casa Ley, HEB, Sanborns, Coppel y Farmacias París, entre otras.
Lacrin a futuro
Como buena emprendedora, Galia tiene muy claro el futuro de su empresa, especialmente con los mercados a los que quiere llegar.
“Como veo que está creciendo la empresa, definitivamente quiero tener una línea muy amplia de productos. Nos estamos enfocando mucho en crecer la comercialización y el volumen. Ya tenemos presencia en Estados Unidos y me gustaría tener presencia en varios más de Centroamérica, Sudamérica… y crecer en el mercado latino, ofreciendo una gama mucho más amplia de productos”.
¿Qué le diría a Olimpia?
Luego de escuchar lo que ambas dijeron durante esta sesión, Galia le expresó lo siguiente a Olimpia:
“Lo traemos de ustedes. Tienen una responsabilidad muy grande, porque toda mi generación las vemos a ustedes, es de donde nos agarramos. No era tan común que hubiera mujeres como tú haciendo cosas tan espectaculares y de ahí nos estamos colgando”, mencionó Galia.
Frases:
- “Como mujer, te digo que he sido muy afortunada de encontrar gente increíble en el proceso, y, sobre todo, muchas mujeres que están haciendo cosas muy valientes de quienes me gusta aprender”.
- “Mi mayor reto en esta vida, o lo que yo quiero lograr, es inspirar; yo hago las cosas para inspirar”.
Estilo Players
Restaurante favorito:
- La Docena
Platillo favorito:
- Pulpo o Ceviche peruano acompañado de un buen vino
Destino de viaje:
- Región vitivinícola de Italia y navegar por el Golfo de Cortés en su velero
