Ya lo dice el refrán popular que cuando una puerta se cierra, otra se abre, y en el caso de la empresa Nieves Fiestas, creadores de las tradicionales donitas que aromatizan el Centro de Guadalajara, están decididos a ponerlo en práctica.
Hace un par de semanas las autoridades ordenaron el desalojo del Edificio Plaza, ubicado en el corazón de la Perla Tapatía justo frente al Palacio de Gobierno, debido a fallas estructurales, ahí se encontraba uno de los locales más emblemáticos del primer cuadro: el de las “donitas del Centro”.
“El sábado (26 de junio) nos dicen ‘Hay que irse’, y entonces nos volvimos locos. Nos dijeron ‘Tienes 36 horas, el lunes al terminar el día bajas la cortina y ya el martes o miércoles vienes, pero ya a sacar tus cosas”, cuenta Javier González, propietario de la empresa Nieves Fiestas, uno de los 20 comercios que junto con el Hotel One Guadalajara fueron obligados a frenar sus actividades.
Aunque admite que esta situación los sorprendió, Javier González se dice conmovido y agradecido por la explosión de reacciones en redes sociales que generó la noticia de la posible desaparición del antojo cuyo característico olor invadía las calles del primer cuadro de la ciudad.
Los seguidores en la página de Facebook de Nieves Fiestas se incrementaron sustancialmente durante los días posteriores a la noticia, y la ola de comentarios incluso hizo que las Donitas Fiestas llegaran a Instagram con su propia cuenta (@DonitasFiestas).
Con esta ola de popularidad, el equipo de Nieves Fiesta se dedicó a responder los mensajes con la aclaración, y buena noticia, de que la tradición no terminaba con el cierre del local sobre el Paseo Alcalde, porque a solo unos metros de ahí funciona otra sucursal donde se pueden comprar las mismas donitas con su peculiar sabor.
La segunda sucursal de Nieves Fiesta se ubica en el andador Pedro Loza #21, a menos de 200 metros del local que fue obligado al cierre después de 27 años de estar presentes la esquina de Pedro Moreno y 16 de Septiembre.
Los planes para que las “donitas del Centro” sigan presentes en la vida de los tapatíos, no se limitan solo a mantenerse operando en la ubicación alternativa en el Centro tapatío, sino que muy pronto las tradicionales donitas comenzarán a conquistar otras zonas de Guadalajara y Zapopan.
Con “delivery”, las donitas llegarán a más zonas de Guadalajara
En entrevista para PLAYERS of Life, Javier González cuenta la “coincidencia” de que casi al mismo tiempo que las autoridades ordenaron el cierre del Edificio Plaza, él estaba firmando el contrato para la renta de un nuevo local en el barrio de Santa Tere.
Este local está ubicado en la calle Manuel M. Dieguez #855, casi esquina con José María Vigil, pero lo importante es que será la punta de lanza para comenzar a operar bajo el modelo de aplicaciones digitales de servicio a domicilio.
“La idea sí es tener tres o cuatro puntos en toda la ciudad. A este de Santa Tere le tengo mucha fe, porque el radio de cinco kilómetros de entrega me incluye las zonas del Country Club, Conjunto Patria, Altamira, todo Providencia, parte de Lomas del Valle, Ladrón de Guevara, la Americana, Minerva”, explica el empresario tapatío.
Javier González reconoce que el reto de apostar por este modelo de aplicaciones de “delivery” son las comisiones y el tamaño del ticket que generan sus ventas.
De arranque, las donas de Nieves Fiesta estarán disponibles en la app Menú Local, un emprendimiento digital impulsado por el propio sector restaurantero para la reactivación económica tras los meses más complicados del confinamiento.
Sin embargo, el propietario de la empresa fundada en 1947 no descarta considerar otras aplicaciones que le pudieran generar beneficios y lograr mantener la rentabilidad de sus operaciones.
Si estos primeros pasos en las plataformas digitales marchan bien, en los próximos meses las donitas, y el resto de productos de Nieves Fiesta, seguirán llegando a otras zonas como Chapalita, o incluso más al Sur por el corredor López Mateos y la Zona Real (Valle Real, Jardín Real y aledañas).
La historia de las donitas del Centro tapatío
La historia de Nieves Fiesta comienza en 1947 cuando en una casona de la calle de Pino Suárez, en el Centro de Guadalajara, Ignacio González (abuelo del actual propietario) decide emprender el negocio de la fabricación y venta de helados, en una adaptación del negocio familiar de caramelos y refrescos.
Unos dos o tres años después, deciden ampliar el menú con una receta traída por la familia desde California, Estados Unidos: las pequeñas donas fritas en aceite de coco.
“A mí me llegó a contar mi abuelo, que ya que estaban bien establecidos a mediados de los 50, el sábado y domingo que salía todo Guadalajara a pasear, llegaba a vender dos mil paletas por día“, rememora el responsable de mantener el tradicional negocio.
Fue entonces, a mediados del siglo pasado, cuando aparecieron las donitas en la vitrina del primer local, que para entonces se ubicaba justo a contraesquina de la Catedral, en la calle Morelos y Alcalde.
El éxito que ya tenía Nieves Fiesta, de inmediato contagió a las donitas y en poco tiempo se volvió uno de los antojos favoritos de los tapatíos.
“Yo creo que lo de las donitas debe haber detonado por ahí de los 60, a finales de los 50 que es cuando empieza también la expansión a otros lugares, y ya luego las donitas se comieron el negocio”.