Por: Adriana y Mariana Castillo Cota
Directora General y Directora de Operaciones de LUO
Sitio web: www.luo.mx
Instagram: @luo_mexico
Año nuevo y por lo mismo nuevas tendencias que apuntan hacia algunos cambios en el mundo del diseño y que, seguramente, veremos en los cada vez más actuales edificios, oficinas, restaurantes, muebles, moda, y diseño en general de nuestro entorno.
Sin duda el diseño de lujo juega un papel importante en esto, ya que distintas marcas toman su inspiración basándose en las pautas que presentan las grandes compañías que lideran los mercados de alta gama.
Si bien el 2018 fue un año donde pudimos ver decoración dominada por grandes avances tecnológicos, en 2019 nos movemos hacia materiales más frescos y naturales, tales como piedras, cobre, concreto y granito. Estos elementos podrán vestir cualquier espacio de manera serena, aunque una tendencia también es encontrar lo mejor de cada parte del planeta: piedras exóticas traídas de lugares insólitos, maderas tropicales, cobre y metales elaborados a mano. En una palabra: unicidad.
Pero, ¿quién marca la tendencia inicial? Las tendencias se marcan de manera muy similar en la arquitectura, la moda o el diseño de interior. Las grandes casas o marcas preparan cada año junto con su equipo de marketing y una serie de personas que incluyen psicólogos y básicamente cualquier profesión que estudie las ciencias de la conducta y comportamiento humano, reuniones internas donde se indica hacia dónde apuntan los gustos de las personas.
La tecnología ha jugado un papel cada vez más importante en este tema, ya que gracias al comportamiento en redes sociales e internet es más sencillo identificar patrones de conducta y preferencias.
Una vez definido esto se comparte la información con los encargados de “traducir” estos resultados; son ellos quienes se encargan de buscar materiales que respondan a lo que el mercado pide y finalmente armar las colecciones completas de tendencias con las que los diseñadores trabajaremos.
Existen plataformas que arrojan estos resultados mucho antes de contar con ningún tipo de producto en el mercado. Las casas de diseño invierten millones de dólares cada temporada para contar con las mejores estadísticas y los resultados más precisos que les asegurarán que un diseño sea bien recibido en el mercado.
Sin embargo, es importante ser conscientes que un producto no se diseña de la noche a la mañana y que es una especie de guerra contrarreloj la que se vive, porque, en general, las tendencias pueden cambiar de la noche a la mañana.
Es curioso cómo si analizamos a fondo, nos daremos cuenta que quizá nuestros gustos ni siquiera son realmente nuestros, sino que de una manera u otra son influenciados por una serie de factores que nos orillan a pensar y percibir de cierta forma el diseño.
