La especialista en imagen detrás de grandes proyectos creativos
En el universo de la moda, la imagen personal y la producción visual, el trabajo de un stylist profesional se ha convertido en una pieza clave para construir identidades, comunicar ideas y potenciar marcas. Esta semana en Cooljobs, conocemos la historia de Diane Stylist, una creativa que ha hecho del vestuario y la estética un lenguaje propio.
Desde muy joven, Diane Stylist descubrió que su pasión estaba en todo aquello que rodea la indumentaria: la ropa, los colores, las texturas y la capacidad que tenemos de expresar quiénes somos a través de lo que llevamos puesto. “Soy stylist y me dedico a todo lo que tenga que ver con vestuario, indumentaria e imagen”, cuenta. Su trabajo consiste en equilibrar visualmente a una persona o grupo para transmitir un mensaje específico. En publicidad, esto significa crear una narrativa visual que permita vender un producto, representar una marca o reforzar una identidad por medio del look adecuado.
El styling como puente entre la moda y la narrativa visual
Para Diane, ser stylist no es solo elegir prendas; es construir un lenguaje. “Un stylist equilibra la imagen de una persona para presentar una marca, un estilo personal o un mensaje”, explica. Esto implica entender la esencia del proyecto, la intención emocional y la psicología del color, elementos fundamentales para la industria creativa actual.
Su formación en diseño de moda fue el primer paso. Mientras estudiaba, también modelaba, lo que le permitió observar de cerca cómo funcionaba el mundo editorial, las producciones de foto y los procesos detrás de una campaña publicitaria. Ese contacto temprano con la industria despertó en ella la necesidad de experimentar, de construir looks, de jugar con la forma en la que las prendas cuentan historias.
Lo que comenzó como un ejercicio espontáneo para Diane Stylist, se transformó rápidamente en una oportunidad concreta. Diane empezó a vestir a sus compañeras modelos para que pudieran armar su book. Más tarde, fotógrafos y amigos le pedían piezas de sus proyectos escolares: su prenda del examen, diseños propios o incluso parte de su colección personal. “Siempre he sido una coleccionista”, confiesa.
Sin darse cuenta, ya estaba construyendo su primer portafolio de stylist.
Construyendo una carrera desde la sensibilidad y el instinto creativo
Al graduarse, Diane Stylist no solo tenía experiencia, sino también un archivo visual sólido para presentar. En un mercado tan veloz como el de la publicidad, donde la necesidad de un stylist surge con urgencia, su sensibilidad estética encontró un espacio inmediato. “Todo pasó rápido; se dio el hueco, la oportunidad de Diane”, recuerda.
Lo que impulsa su trabajo es el gusto por las formas, los colores y la emoción detrás de cada look. Le interesa tanto lo que siente ella como lo que debe transmitir la persona a la que viste, ya sea un modelo, un actor o un talento para campaña. Cada proyecto es un proceso de interpretación.
Un cierre lleno de gratitud
Con una carrera en crecimiento y un enfoque auténtico, Diane Stylist agradece a quienes han sido parte de su camino. “Muchas gracias al equipo de Players y a Fátima por esta linda entrevista. Gracias por el espacio.”
Su historia en Cooljobs es un recordatorio de que el styling es más que moda: es sensibilidad, narrativa y pasión por transformar ideas en imagen.
