Nacido en Torreón, Coahuila en el año de 1996, Carlos Acevedo fue un niño como cualquier otro, llevó a cabo sus estudios en el Instituto Cumbres de Torreón y durante toda su vida ha sido apasionado por el futbol. Desde los tres años que empezó, siempre buscaba la forma de estar muy involucrado en el deporte. Llegó al Club Santos Laguna hace nueve años como un extraño, por medio de un visor que le pidió se probara con las fuerzas básicas del equipo.
¿Cómo fue que lograron ver tu talento como futbolista?
En el Cumbres yo jugaba en el equipo de futbol donde disputé varios torneos oficiales a nivel colegial, torneos de la amistad, bimbolazos entre otros. En un torneo regional se me acerca una persona del Club y me comenta la idea de venir a probarme a las fuerzas básicas, y con mucho gusto acepté.
¿Cómo es tu vida profesional y personalmente en la actualidad?
Actualmente estoy en el primer equipo como tercer arquero, muy contento, muy honrado de estar con personas tan influyentes en el futbol como Agustín Marchesín y Carlos Izquierdoz, seleccionados nacionales como Jesús Molina y Néstor Araujo. Es un honor estar ahorita en el equipo como tercer arquero y personalmente estoy estudiando la carrera de Administración, entonces por la mañana entreno y en las tardes me dedico al estudio.
¿Por qué te decidiste a ser futbolista?
Al principio como niño nada más es jugar futbol, poco a poco van pasando los años y te vas dando cuenta de qué es lo que quieres. Lo mío empezó como a los 15 años, cuando ya empezabas a pensar un poquito más las cosas, y no lo dudé en ningún momento
¿Cómo son tus entrenamientos?
Los entrenamientos son de alto rendimiento, y para poder rendir dentro del terreno de juego el tema de la nutrición es fundamental ya que son muy pesados: son de dos a dos horas y media; trabajamos lo que es potencia, velocidad, resistencia y fuerza; tenemos entrenamientos 5 días a la semana y también conlleva rutina de gimnasio.
¿Qué es lo más demandante de tu profesión?
El esfuerzo y el saber lidiar con las personas correctas. También debes tener muchos sacrificios como la responsabilidad y disciplina. En un caso personal, casi no pude salir con mis amigos durante mi adolescencia por el simple hecho de estar acá, involucrado en el futbol. He perdido muchas amistades, pero a final de cuentas cada sacrificio tiene su recompensa, y poco a poco creo que ha valido la pena porque siempre he tenido muy en claro mi futuro.
¿Quién es tu ídolo dentro del futbol?
A nivel nacional, Oswaldo Sánchez, con quien tuve la fortuna de entrenar y el actual portero del Santos Agustín Marchesín quien además de ser un gran arquero es una gran persona y un gran amigo. Son dos personas que idolatro y respeto mucho y me gustaría llegar a ser como ellos en un futuro. Y a nivel internacional, el portero de la selección de Bélgica, Thibaut Curtois, me veo reflejado en él por el físico un poquito.
¿Tienes algún ídolo fuera del futbol?
Sí, mi padre, definitivamente es mi persona a seguir y mi ídolo en todos los aspectos. Mi papá ha sido muy influyente en mi toma de decisiones, en mi control de emociones y por eso es mi modelo a seguir.
¿Cómo veremos a Carlos Acevedo en cinco años?
Me veo como una persona sana, humilde y a nivel profesional consolidado en primera división ya con mucha más experiencia de la actual, con mi título de Administración y un negocio propio que tenga que ver con mi carrera.
Consejo o recomendación para las nuevas generaciones…
No dejen el estudio, la carrera del futbolista es muy bonita pero también tiene muchos riesgos, como las lesiones. Entonces creo que la escuela es fundamental, ‘el estudiar y jugar se puede’. Nadie nos quita el derecho a soñar, así que no dejen el estudio y luchen por sus sueños para cumplirlos.
