Bajo la filosofía de que cada novia es una historia, el wedding planner Juan Pablo Partida encierra cada detalle y le ha puesto su sello a los sueños de más de 500 parejas a nivel nacional.
Y, ¿por qué cada novia es una historia? “Todos queremos tener nuestra propia historia de amor; las personas somos tan distintas que nadie debería tener el mismo sueño; pues así plasmamos cada proyecto, completamente distinto al otro para contar así su historia”, dice Juan Pablo Partida, Director de la Marca.
Su interés de convertirse en wedding planner surgió cuando tenía 20 años de edad y decoró por primera vez una fiesta, “fue de temática hawaiana en un bar ayudando a un amigo y me gustó la experiencia, pero no continúe con eso mucho tiempo”, recuerda.
Lo retomó y recordó ese gusto cuando se realizaron los premios MTV en Guadalajara en el año 2008, y lo invitaron a participar como parte del staff.
“Para esas mismas fechas comencé a trabajar en una agencia de marketing donde realizábamos campañas y eventos para diferentes marcas. Nos tocó apoyar a producir fiestas y conciertos para diferentes marcas con artistas de diferente parte del mundo, y es ahí donde mis amigas me pidieron que les ayudara con sus bodas. En esos tiempos solo había dos o tres wedding planners, la primera amiga me convenció y de ahí no hemos parado, ya son casi nueve años de trayectoria”, expresa. Comenzó su trayectoria como wedding planner organizando con mucho amor esta boda para una de sus amigas.
“Era para 150 personas, a las afueras de Guadalajara. Estuvo muy divertida porque me tocó con una amiga hacer los arreglos florales, realizar el montaje, la decoración y la logística del día”, comparte.
Para Juan Pablo el día a día de un wedding planner es… “Caótico… broma. Es muy divertido, entre semana estamos planeando, revisando pedidos y atendiendo a las novias. Los fines de semana estamos en acción, produciendo bodas y trabajando en campo, donde es muy divertido. A veces no tienes tiempo ni para sentarte a comer algo y cuando lo haces ya son las 2 de la mañana”, comparte.
Cuando comienza con la organización de una boda lo más importante para él siempre es el lugar de la fiesta y de la ceremonia, ya que eso les dará la fecha de la boda. Y, desde su experiencia profesional las claves para que una boda esté perfecta y sea una experiencia bonita y memorable tanto para los novios como para sus invitados es la decoración, el banquete y la música, “tres elementos igual de importantes ni uno más que el otro”, argumenta.
Para el wedding planner no existen problemas porque siempre los ve como retos y como oportunidades de trabajo. Sin embargo, el evento más complicado que ha tenido durante su trayectoria fue recrear una construcción arquitectónica de Luis Barragán para un homenaje.
“Esto fue hace unos tres años y el reto fue realizarlo desde cero, en una cancha de futbol la cual fue una construcción total y trabajamos con nuestro socio comercial Soporte Eventos para encontrar el sistema para levantar paredes de nueve metros que resistieran lluvia y viento”, recuerda.
Otro, fue construir todo el evento en medio de una selva, cerca de la playa donde realmente no tenían, nada y tardaron ocho días en levantar todo el evento.
En sus palabras
¿En qué te inspiras para diseñar una boda?
Nos inspiramos siempre en las parejas; escuchamos a los novios y a partir de lo que las parejas nos platican, tomamos inspiraciones para poder diseñar algo único para ellos.
¿Qué amas más de tu trabajo?
Todo. Ver a los novios y a sus familias felices el día de la boda, son meses de trabajo con ellos y verlos contentos y disfrutando su boda, todo esto por el trabajo que hemos realizado, es lo que amo…. cumplir sus sueños.
¿Dónde te ves en los próximos 5 años? ¿Qué metas tienes?
Por el momento estamos creciendo como empresa, tenemos una empresa de renta de mobiliario y traemos otros proyectos dentro de la misma industria de eventos, pero en resumen es crecer y estar presente en todo el país.
