José Manuel Rodríguez se define como visionario, capcioso y muy tenaz. Sus hobbies son montañismo, motociclismo y ciencia. Nació el 11 de julio de 1953, en Monterrey. Es Ingeniero Mecánico Administrador por la UANL, con Maestrías en Administración e Ingeniería Nuclear UANL/UT (EU). Empezó a practicar el montañismo y por su entrega, en pocos años obtuvo notables logros en el extranjero. En esta disciplina ha encontrado aventura, aprendizaje y la oportunidad de estar en contacto con el mundo y sus maravillas, así como consigo mismo. Entre las cumbres que ha escalado está la Iztaccíhuatl (abril de 1984), como entrenamiento de expedición, incluyendo escalada en hielo; así como el Aconcagua (Argentina), Manso (Argentina), Chimborazo (Ecuador), Cotopaxi (Ecuador), Rucu Pichincha (Ecuador), Huascarán (Perú), Maparaju (Perú), Misti (Perú) e Illimani (Bolivia), que alcanzó en dos expediciones: Aconcagua 86 y Huascarán 88, participando en ambas como Jefe de Expedición.
En junio del 2000 ascendió al Monte Blanco (Francia). Abrió las rutas de Buena Voluntad de escalada en roca (arista este, M poniente, Sierra Madre Oriental) y Murallas Blancas (ascenso frontal, M oriente, Sierra Madre Oriental); asimismo obtuvo cinco rutas nuevas para neoloneses en el Pico de Orizaba, y en sí más de 70 ascensos a más de cinco mil metros de altura, incluyendo acampar en las cumbres de los tres cinco miles nacionales. Su interesante trayectoria nos remite a su periodo de Director de la Escuela de Montaña de la Asociación de Excursionismo y Montañismo de Nuevo León en 1985 y 1986, donde fue nominado montañista del año en 1984, 1985, 1986 y 1988.
Ha enseñado y difundido el montañismo como deporte seguro, participando activamente en varios rescates. También ha asesorado varias expediciones internacionales: Ascenso al Kilimanjaro (Tanzania), Monte Kenia (Pico Lenana), Matterhorn (Suiza), en unio y julio de 1994. Ha sido promotor, coordinador y guía de grupos de formación de montañistas, y es autor de la columna semanal Mundo de Montaña, publicada en el diario local de mayor circulación, de octubre de 1988 a julio del 2000.
Fue responsable y líder del Frente Civil de NL, manejando a 400 personas por día y coordinando el trabajo aéreo durante el incendio forestal de la Sierra de Chipinque del 10 al 20 de abril de 1998, recibiendo la medalla al mérito de Olinalá. Los retos más significativos que ha enfrentado han sido en Huascarán (siete mil 678 msnm) en Perú, que implicó escalar en roca y hielo; y el Monte Mckinley (seis mil 320 msnm) en Alaska, la montaña más alta de Norteamérica, considerada la más fría del mundo por ubicarse dentro del círculo polar ártico. José Manuel goza la convivencia con su familia y amigos al hacer montañismo. Como deportista su siguiente reto es transmitir a nuevas generaciones lo mucho que le ha dado la montaña, y seguir cosechando las metas alcanzadas.