Desde la cuna, la logística y el transporte eran temas de todos los días en la casa de Miguel Ángel Flores Serna, quien tiene sus raíces en la región citrícola de Nuevo León, justamente en el municipio de Allende. Y es que, con una arraigada cultura del trabajo, tanto su abuelo paterno como el materno emprendieron desde cero con sus respectivos negocios enel gremio transportista.
Uno de ellos ya falleció, pero su abuelo Don Florencio Flores, que ronda los 90 años, sigue activo. “Inició a los 14 años, con su propio camión, y ahora tiene una empresa muy grande y consolidada. Mi papá trabajó con él y luego se independizó e hizo su propia empresa”, cuenta Mike, como lo conocen su familia y amigos.
Aunque desde la secundaria asistía obligatoriamente al negocio cada sábado, fue hasta la carrera cuando se involucró formalmente en el negocio familiar como responsable de compras y ventas y después como director de finanzas.
Nuevos rumbos
A los 21 años, Mike inició su propia empresa de transporte y más adelante una financiera, pero de manera paralela siguió en el negocio familiar y se dedicó a él durante una década, hasta que llegó la propuesta del cargo que hoy ocupa en el Palacio de Gobierno.
Lo cierto es que esos 10 años los dedicó a institucionalizar la empresa familiar, que cuenta con 11 terminales a lo largo del país. Implementó nuevas dinámicas y procesos, además de propiciar la creación de una nueva unidad de negocio especializada en productos peligrosos e industria automotriz.
Adicionalmente, abrieron abrieron filiales en Estados Unidos y Canadá, para atender principalmente a los clientes que requieren de estos gases industriales, como es el caso de General Motors, con rigurosos temas de logística que son fundamentales para su operación. “Por el tema de cumplimiento de los tiempos se vuelve algo muy estratégico”, advierte Mike, quien aún forma parte de la junta de consejo en la empresa de su familia.
Responsabilidad y compromiso
Hermano mayor de Marcelo y Raquel, abogado fiscalista y fotógrafa, respectivamente, Mike fue el único que siguió los pasos de sus abuelos y padre, a quien le admira su pasión por el transporte y la logística, así como de disfrutar su capacidad para disfrutar del trabajo al máximo. “Mi papá es incansable, siempre me inculcó el trabajo y la disciplina”, dice.
También es esposo y padre de dos hijos, a quienes busca inculcar la unión familiar y en su momento, la pasión por el trabajo, Mike tiene como pasatiempo el ciclismo, actividad que procura no sólo por la parte física sino también la mental. Nada como una rodada por las montañas para conectar no sólo con la naturaleza, sino consigo mismo. “Empecé en el ciclismo de montaña y de ahí después seguí en el de ruta”, comenta.
Platica que siempre le llamó la atención la política, aunque su único contacto con el tema había sido con la participación de la empresa en las cámaras del transporte a las que estaban afiliados, donde hay interacción con autoridades locales, estatales y federales.
Con el reto de alistar la ciudad para la Copa Mundial de Fútbol 2026 y con el boom de inversión extranjera, el día a día es desafiante para Mike y su equipo de trabajo. “Es mucha planeación y mucha estrategia, sobre todo logística, también ver tema de universidades, de logística, viene una locura de construcción, hoteles, vivienda, etcétera”, señala.
Ahora Mike enfrenta toda clase de retos y aunque es un escenario nuevo, del mismo modo es 24/7, con acciones estratégicas para dar el mejor resultado con eficiencia y calidad. Al final de cuentas, el nivel de responsabilidad y compromiso que siempre ha tenido con sus clientes, ahora lo tiene pero con los ciudadanos.
