Del corazón a la cocina: la emprendedora detrás de los postres que conquistan Monterrey
En el corazón de cada receta existe una historia, y la de Amor y Sal, el negocio de postres y entremeses gourmet creado por Valeria Elizondo, es un testimonio de resiliencia, creatividad y amor por la cocina. Este emprendimiento gastronómico, fundado hace aproximadamente cuatro años, nació durante la pandemia, en un momento en el que muchas personas decidían reinventarse.
“Lo planifiqué en la pandemia, con las herramientas que tenía. Vi un área de oportunidad en este tipo de comida y decidí desarrollar más la idea”, cuenta Valeria. Así nació Amor y Sal, una marca que lleva en su nombre los dos ingredientes principales que definen su esencia: el amor por cocinar y la sazón que transforma lo cotidiano en especial.

Formación culinaria con visión empresarial
Valeria Elizondo no llegó a este proyecto por casualidad. Es egresada de la Licenciatura en Gastronomía y Administración Culinaria, una carrera que le dio no solo habilidades técnicas en cocina, sino también los conocimientos necesarios para emprender con solidez.
“Aprendí muchísimo: de cocina del mundo, panadería, repostería y también de administración, costos, estrategias… Todo lo que hay detrás de un negocio gastronómico. No es solo cocinar, es crear una experiencia completa”, explica.
Este enfoque integral le permitió dar forma a Amor y Sal con una visión clara: ofrecer postres artesanales y entremeses que no solo sean deliciosos, sino que conecten con las personas a través de la calidad, el sabor y la presentación.

Recetas con historia y evolución constante
Las creaciones de Valeria no son improvisadas. Son el resultado de años de aprendizaje, pruebas, ajustes y pasión. “Uso recetas que tengo desde hace mucho, otras que perfeccioné en la escuela o en cursos que sigo tomando. Siempre estoy probando, modificando, cambiando. Amo esta parte del proceso”, comparte.
Cada producto de Amor y Sal refleja esa dedicación. Desde sus postres insignia hasta los entremeses más creativos, hay una intención clara de ofrecer algo auténtico, hecho a mano y con ingredientes seleccionados cuidadosamente.
Este enfoque ha generado una base sólida de clientes fieles, que recomiendan sus productos de boca en boca, valorando no solo el sabor, sino la experiencia completa.
Un negocio con propósito y mucho corazón
Para Valeria, Amor y Sal es más que un negocio. Es su forma de compartir lo que ama, de crear momentos especiales en la vida de otras personas. “Hemos hecho amor en Amor y Sal. Es lo que ofrecemos en cada pedido: amor en forma de postre”, dice con orgullo.
A través de redes sociales y pedidos personalizados, la marca ha ido creciendo, posicionándose como una opción confiable y deliciosa para quienes buscan postres caseros de alta calidad en Monterrey y más allá.

Síguela y descubre el sabor de lo hecho con amor
Amor y Sal es una marca en constante evolución, que representa lo mejor del emprendimiento joven en México: creatividad, formación, pasión y autenticidad. Si buscas entremeses gourmet, postres inolvidables y una experiencia que va más allá del sabor, esta es una propuesta que no puedes dejar pasar.
Sigue a Valeria Elizondo y su marca en redes sociales como @amorysalmx y déjate enamorar por el dulce arte de cocinar con propósito.


