La actriz regiomontana, Maryel Abrego, regresó a la pantalla chica con la segunda temporada de C.H.U.E.C.O de Disney Plus para interpretar a Delfina Gustozzi; ante este nuevo reto; la artista afronta la madurez actoral y apunta a las grandes ligas.
Desde los Talent Shows en la escuela, Maryel reconoció una gran pasión por el escenario, la cual la llevaría a los cursos y talleres de la Facultad de Artes Escénicas de la UANL para después migrar hacia Ciudad de México para estudiar actuación en CEA Televisa, donde desarrolló su talento en obras de teatro escolares.
Después llegaron proyectos con grandes plataformas, como es el caso de ‘Dale gas’ de Netflix con el personaje de Paloma, posteriormente, a través de un casting recomendado por un amigo suyo, llegaría al que hasta ahora es su proyecto más grande: C.H.U.E.C.O, serie de Disney Plus protagonizada también por Consuelo Duval y Dario Barassi.
TE RECOMENDAMOS | Walter Mata, WasCo y la solución sustentable a la industria cementera
La grabación de C.H.U.E.C.O 2
Durante las grabaciones de la segunda temporada del Sitcom en Argentina, el crecimiento fue mayúsculo, el desarrollo personal no pasó de largo.
Las grabaciones se realizaron en Buenos Aires, por lo que la lejanía y la nostalgia fueron retos por afrontar para la actriz, los cuales fueron superados con el apoyo de Consuelo Duval.
“Consu (Consuelo Duval) fue una un ángel para mí; me ayudó muchísimo, me acuerdo mucho estar en una escena y me agarró a un ataque de ansiedad y Consu me abrazó fuertísimo y tres, dos, uno, acción y sonrisa.”
Pese a las adversidades , la segunda temporada llegó a buen puerto; acompañada de un guión bien estructurado y una comedia atinada, Maryel pudo identificarse con el papel de Delfina y entregar una actuación ad hoc al tono cómico de la sitcom.
Encontrar el equilibrio
Despegarse del personaje es una de las tareas más duras para el actor, pero Maryel Abrego reconoce que es un punto clave para encontrar el balance persona/profesionista.
“Es una línea muy delgada y de mucho cuidado durante mucho tiempo pensé en la actuación como terapia, pero no creo que vaya por ahí, creo que tiene que haber realmente un trabajo de terapia personal y después entender que actuar es un juego que estás jugando.”, menciona.
Amar la actuación
“Es muy importante amar lo que haces, porque si no ¿qué estás viviendo?”
Encontró su pasión desde temprana edad y está en búsqueda de nuevos retos para su carrera, a los 23 años; con ejemplos cercanos como el de Adriana Paz, recién galardonada en Cannes, la mira apunta ahora hacia los largometrajes.
“Uno de los objetivos que tengo ahora es hacer ficción digna de un Ariel”, agrega la actriz.
Fijar metas y objetivos es clave para Maryel, los considera como una clave para seguir su desarrollo actoral y personal; pero el motor profundo radica en el amor.
“Si uno ama lo que hace nunca se va a perder”