La experiencia se obtiene año con año y en este sentido, Pierrot, que en enero llegará a los 43 años de su fundación, la tiene más que confirmada y se ha convertido en uno de los restaurantes más tradicionales de Guadalajara.
Fundado en 1981 por el chef francés Pierre Dhainaut, este lugar ubicado en Justo Sierra, ofrece una experiencia gastronómica basada en la tradicional cocina de campo de Francia.
“La intención siempre fue la de una cocina tradicional francesa, como tradicional me refiero a la cocina del campo, no nos metemos mucho en esas cuestiones de la nouvelle cuisine, de los platillos altamente adornados y con 100 colores, pero 42 gramos de alimento.
Somos más esa cocina del campo, de esa cocina lo más auténtica y tropicalizada lo menos posible, hasta donde podemos conservar una receta”, explicó Piotr Christian Henry Dhainaut Murueta, hijo de Pierre y quien actualmente, al fallecimiento del fundador, se ha convertido en gerente general y chef ejecutivo de Pierrot.
Con ingredientes frescos, como es el caso del salmón canadiense, el cual llega vía aérea desde Canadá, Pierrot ha conquistado los exigentes paladares tapatíos con sus sabores, pero también con el servicio.
“No hemos hecho cambios sustanciales de concepto, ni de cocina, ni de servicio, porque el servicio es muy importante es un servicio ‘a la francesa’, se usa así ese término, que es un servicio así, cuchareado, tu plato te llega vacío y llega el mesero y te sirve, es como otro concepto”, dijo Dhainaut.
Pierrot, el sabor francés con sello tapatío
Como ejemplo de esta filosofía se encuentra David Madrid, capitán del lugar, quien con 30 años de labor en el restaurante ya conoce los gustos de aquellos clientes que acuden de manera regular al Pierrot.
“La mayoría de los clientes, los clientes de toda la vida (dicen) ‘ya no me traigas el menú, ya sabes, mi filete a las cuatro pimientas o mi trucha almendrada’ y todavía me ponen tarea, ‘ya sabe el Capi’. Es que son los más pedidos esos, el filete y la trucha, los escargots”, dijo Madrid.
Para aquellos que deseen conocer la experiencia de Pierrot de primera mano, Dhainaut tiene las siguientes recomendaciones: “Si a mí me preguntas qué recomiendo, me voy a los platillos del día, si nos vamos a los insignia, a los de siempre, los clásicos, los de la carta, me iría a un filete a las cuatro pimientas, me iría a una trucha almendrada, a una sopa de cebolla, incluso una ensalada césar, aunque sí se hace en otros lados, pero la de aquí tiene su fama, los escargots de Borgoña”.
En los platillos del día hay diferentes opciones, como cremas, sopas, carnes de cordero o de res, así como diferentes pescados.
Con estas características, es que Pierrot ha ido, paso a paso, en la consolidación de una tradición que lo convierte en un lugar de referencia en Guadalajara para disfrutar de aquella cocina francesa que busca deleitar a través de sabores, aromas, presentaciones y servicio.
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Para inspirarse
“Nosotros representamos la tradición, el buen comer, la buena mesa, el buen servicio, eso es lo que definiría a Pierrot”.
“Un cliente, si lo pudiera definir, es alguien que le gusta comer, le gusta sentarse sin prisa, que le gusta degustar algo de vinos o destilados de cierta gama y que viene a pasarla bien, sin presiones de nada”.
