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noviembre 25, 2024

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El flamenco y la herencia – Por Dolores Tapia

Al flamenco uno se acerca por amor y ese amor te muestra un mar insondable de conocimiento, una estela de nombres y referencias que vienen de muy atrás.

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El encuentro se realizó del 8 al 15 de julio pasado / Fotos: Especiales

Por Dolores Tapia, promotora y gestora cultural

@lacantinta

@dolorestapia

En la última edición del Festival Ibérica Contemporánea, en Querétaro, tuve la oportunidad, inmersa en las entrañas del Teatro Metropolitano, una de sus sedes, de vivir grandes noches. Dicho festival es el más grande que tiene México en cuanto a danza flamenca se refiere.

En innumerables conversaciones con el bailaor Juan Paredes, un gran maestro del “soniquete”, se puso sobre la mesa la importancia medular de los grandes maestros para el desarrollo del flamenco y del flamenco en México.

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Al flamenco uno se acerca por amor y ese amor te muestra un mar insondable de conocimiento, una estela de nombres y referencias que vienen de muy atrás, que resultan una constelación de herencias de las que hay que saber para ubicarnos en el presente.

 Así, nos acercamos a Cristóbal Reyes, un maestro del baile, de los más prestigiosos hoy en día en espacios como Amor de Dios, allá en Madrid, formador de talentos, incluido Joaquín Cortés, con quien colaboró en los espectáculos “Pasión Gitana” y “Del amor y el odio”. Sin embargo, Cristóbal Reyes es también un verdadero embajador de la danza en México.

Hablar con él es saber de los grandes tablaos de antaño, de la aportación a la historia que hicieron figuras como Martha Forthé, a quien su nieta -también bailarina- María Martha Rodríguez, junto con Marién Luévano y Armando Tovar -todos mexicanos- rindió tributo hasta la lágrima en una noche inolvidable en el Teatro de la Ciudad. México, ha dicho Cristóbal, es hoy más importante para la vivencia del flamenco que la propia España.

La herencia es una piedra angular en el presente de la danza. Hay que destacar que una de las funciones más sentidas y poderosas en Ibérica Contemporánea fue “Flamenco de Raíz”, gala en la que artistas de la talla de Patricia Guerrero -Premio Nacional de Danza 2021-, Karime Amaya -sobrina nieta de Carmen Amaya- y el brillante Eduardo Guerrero rindieron homenaje a “La Chuny” y “La Winy” Amaya, así como a Santiago Aguilar.

Esa noche, ante un público rendido, un teatro abarrotado y con una actuación también magistral de Jesús Corbacho, Pino Losada -de la saga de los Losada-, Jesús Flores, Paul Vallet y Raúl Botella, la comunidad flamenca de México y los artistas de España, rindieron homenaje al rizoma Amaya.

Ante eso, es imposible no preguntarse ¿Dónde estaremos en el futuro? ¿Qué es lo que construimos ahora? Y la importancia nuclear de nuestros maestros y formadores. Porque nunca somos solos y en el arte, mucho menos.

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También el festival ha rendido homenaje a Manuel Segovia, a Violeta y a Raquel Ruiz, los tres capitanes de la Cía Ibérica de Danza, que ha formado un camino indestructible con una poética que a lo largo de los años se ha consolidado como propia.

Personalmente me conmovió hasta el tuétano la ejecución de la Joven Cía Larreal del RCPD “Mariemma”, una de las razones es que de dicha institución han salido grandes bailarines que hoy pertenecen al Ballet Nacional de España, a la Compañía de Antonio Gades, entre otros grandes proyectos de la península ibérica.

Luego de su intervención, Juan Paredes mencionaba lo esencial que fue la maestra Mariemma para su desarrollo en la danza, una mujer que estaba segura que el baile era un creador de la belleza y que esta belleza se sostenía a través del tiempo.

Por supuesto que al escuchar al maestro Paredes, y durante varias sesiones en un festival donde México y España se dan la mano y mantienen un puente artístico, no pude evitar pensar y agradecer a dos grandes maestros que me abrieron la puerta para conocer el universo flamenco: Fernando Llerandi e Hilda Prats de Las Cabales, piedras angulares en mis primeros años de formación en Guadalajara.

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Dicen que la vida nos habla en el lenguaje que podemos entender. Así sea.

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