Por Mariana De la Mora Figueroa, jefa de Centro de Profesores Talent de la Universidad Panamericana
Cuando pensamos en la innovación educativa, es común imaginar a un profesor luchando por lograr que sus estudiantes aprendan y desarrollen habilidades como el pensamiento crítico, incluso con la ayuda de herramientas de inteligencia artificial como el ChatGPT.
La educación está experimentando grandes cambios en esta era digital, y profesores y estudiantes enfrentamos retos cada vez más exigentes para garantizar un aprendizaje efectivo en el aula. Afortunadamente, la tecnología nos ofrece nuevas oportunidades para hacer frente a estos retos.
Es evidente que la innovación educativa nos brinda una solución para atender las necesidades actuales de los alumnos, no le tengamos miedo, ya que nos permite la incorporación de nuevas tecnologías, metodologías y enfoques pedagógicos. La era digital ha transformado el papel del docente, dejando atrás el modelo tradicional de transmisión de conocimientos para convertirnos en guía, facilitador y mediador del aprendizaje.
Es en este contexto, herramientas tecnológicas como el ChatGPT juegan un papel fundamental en la innovación educativa, permitiendo una experiencia de aprendizaje más dinámica e interactiva para nuestros estudiantes.
Cambio de paradigma
ChatGPT que ha causado un gran revuelo en la industria y que puede generar cierta incertidumbre si no se conoce su uso adecuado, es el resultado de una evolución impresionante en la tecnología de modelos de lenguaje natural. Concretamente, se basa en la serie de modelos Transformer desarrollados por Google en 2017, los cuales supusieron un cambio radical en la generación de lenguaje natural.
Estos modelos han sido fundamentales para revolucionar campos como la traducción automática, el análisis de sentimientos y la respuesta a preguntas, permitiendo a los sistemas de inteligencia artificial entender el lenguaje natural con mayor precisión y eficacia.
ChatGPT ha superado las expectativas, permitiendo a los usuarios interactuar con una herramienta que parece hablar con una fluidez y naturalidad asombrosas. Sin duda alguna, se trata de una muestra impresionante del potencial de la inteligencia artificial y de su capacidad para seguir sorprendiéndonos y mejorando nuestras vidas día a día. Es importante destacar que, aunque es una herramienta útil, no puede reemplazar el pensamiento crítico y la investigación en profundidad en la búsqueda de información precisa y verificada.
El ChatGPT es un modelo de lenguaje artificial desarrollado por OpenAI que procesa grandes cantidades de datos de texto para ofrecer respuestas coherentes y gramaticalmente correctas a las preguntas de los usuarios. A pesar de ser una herramienta impresionante, debemos ser conscientes de que tiene limitaciones. Si bien puede generar respuestas precisas a preguntas específicas, no posee un conocimiento profundo sobre todos los temas y puede generar respuestas inapropiadas, ofensivas o peligrosas. Además, su capacidad para entender el contexto en el que se está utilizando puede verse afectada.
Al servicio de la docencia
A pesar de esto, ChatGPT es una herramienta útil para la docencia. Si se usa de manera adecuada, puede ayudar a los estudiantes a aprender de una manera más interactiva y a replantear la forma en que se imparten las clases. Los docentes deberemos de enseñar a nuestros estudiantes a utilizarla de manera crítica y responsable.
Para obtener los mejores resultados, es fundamental hacer preguntas precisas y claras. ChatGPT no puede adivinar nuestros pensamientos, por lo que debemos ser específicos y detallados en la consulta. Aunque puede proporcionar respuestas coherentes y gramaticalmente correctas, es crucial verificar la información que proporciona, ya que su conocimiento no es perfecto ni completo.
Es recomendable utilizar esta herramienta de apoyo para obtener información o ideas, pero no debe sustituir completamente otros métodos de aprendizaje y consulta. Seamos responsables al utilizar esta herramienta y evitemos cualquier forma de uso indebido que pueda generar información engañosa. Si se utilizan respuestas generadas por el ChatGPT, es importante citar la fuente adecuadamente para evitar cualquier problema de plagio. Tomemos en cuenta que es una máquina y que siempre requerirá la supervisión de un ser humano. Hagamos que la tecnología nos ayude a resolver el trabajo básico para que a partir de ello generemos actividades de análisis y de desarrollo de pensamiento crítico.
Aprovechemos las oportunidades que nos brinda la tecnología, pero siempre teniendo en cuenta su uso responsable y ético.