Nishe R. Ornelas, fundadora de la marca White Pony, es una fotógrafa tapatía, apasionada de la imagen y del color.
Pero para conocer un poco más sobre su trabajo, su proceso creativo e influencias, pudimos charlar con ella y logramos ver que es un alma creativa, muy inquieta, gustosa por experimentar y por aprender.
Compartimos a continuación la entrevista que nos otorgó.
¿Cómo descubriste qué tu pasión era la fotografía?
En el 2012, cuando estaba por finalizar mi carrera en Sistemas de Información, comencé de asistente ocasional en fotografía de sociales. Mi ahora esposo, me enseñó las bases de la fotografía y de ahí no he dejado de aprender. Encontré esa pasión que me faltaba y que mi licenciatura no me daba.
¿Cómo surge White Pony Photography?
Al hacer un excelente equipo con mi esposo, decidimos dedicarnos al 100 por ciento a la fotografía y crear una marca. El nombre es básicamente un “inside joke” entre los dos.
En el camino, me di cuenta que siempre me enfocaba en los rostros, lo cual me hizo dudar si mi futuro estaba en la fotografía de sociales y comencé a tomar cursos y workshops con fotógrafos que admiraba en el mundo de la moda. Y desde ahí, no he parado.
¿Qué fotógrafos han influido en ti?
Ricardo Ramos, Jesy Almaguer, Carlos Ruiz y Julia Kuzmenko.
¿Qué ofrece White Pony Photography que el resto no?
Una experiencia de principio a fin, creando una conexión para que todo fluya y estemos en sintonía.
Cada imagen está hecha con un retoque muy puntual y detallado, siempre tratando de transmitir un sentimiento; en cada proyecto que participo se queda una parte de mí.
¿Cuál es tu inspiración?
La belleza que hay en cada rostro y poder realzarla con una luz, una sombra y un toque de fantasía.
Describe tu trabajo en 3 palabras:
Detallado, colorido y femenino.
¿Qué consejo les darías a las personas qué quieren ser profesionales en tu mismo rubro?
Primeramente, no agobiarse por el tema del equipo, la cámara no hace al fotógrafo. Considero que es más importante educar nuestro ojo y estar conscientes de que nunca se deja de aprender. Experimentar hasta el cansancio, jugar con la luz y por sobre todas las cosas practicar, practicar y practicar.
Conoce más de su trabajo: @whiteponyphoto