Padel es un deporte de raqueta que combina los elementos del tenis, el squash y el racquetball.
El juego es rápido y fácil de aprender, con tiempos que duran más que el tenis normal, lo que lo convierte en un deporte divertido y adictivo.
Usando una raqueta corta de fibra de carbono, conocida como “Pala” y una pelota de tenis de baja compresión, el servicio se realiza bajo el brazo y los tiros se juegan antes o después de que la pelota rebote en las paredes de vidrio circundantes, agregando una dimensión única al deporte sobre el tenis convencional.
En Monterrey ya existen desde hace algunos años espacios para practicar este deporte, uno de ellos es Padel Club, que ya tiene dos sedes, una en Santa Bárbara y otro en Santa María, y están por abrir una sucursal más en Esfera, en la zona de la carretera Nacional.
Diego Garza es un joven de 22 años, recién graduado de la carrera de Administración de Negocios con especialización en emprendimiento e innovación digital de la University of Southern California en Los Angeles.
Desde hace unos meses se unió al equipo de Padel Club, fundado por Marcelo Varela y Alejandro Martínez.
El interés de Diego por el deporte es de familia, explica: “En mi caso, yo jugué cinco años tenis de mesa a nivel nacional, varios torneos. Mi papá fue presidente de la Federación de Tenis, mi hermano jugó tenis de pequeño. Yo estaba estudiando fuera de la ciudad y cuando viene lo de la pandemia, me presenta mi papá el nuevo deporte. Empiezo a jugar, el primer torneo lo gané con mi hermano, y desde ahí no he vuelto a jugar otro deporte más que el Padel, y de ahí sale todo, porque todos en mi familia usan la raqueta”.
En Padel Club, Diego se encarga de la mercadotecnia, conseguir patrocinadores, organizar los eventos, conseguir los sponsors para los mismos torneos, lanzar las convocatorias, junto con la importante tarea de convocar a los fanáticos del deporte para que disfruten de una tarde de partido y convivan con los demás jugadores.
Popularidad
Según explica Diego, la pandemia ayudó a popularizar más este deporte junto con el tenis, ya que son de los pocos que podían realizarse en medio de las restricciones y el distanciamiento social.
“Pero poco a poco se fue escuchando más el nombre de Padel, primero en diferentes clubes privados, se enteran que hay el Padel Club, se va corriendo la voz y la cantidad de clientes ha subido exponencialmente al mes, al nivel que por eso hemos querido abrir más sucursales.”
“Cuando llegué había 4 canchas, en marzo 5 canchas y ahorita ya son 6 canchas.”
Diego explica que antes de entrar a Padel Club, junto con su papá visitó Torreón, ciudad donde dicho deporte se ha vuelto muy popular. Siendo una ciudad más pequeña que Monterrey, ya contaba con 60 canchas, lo que les llamó la atención y donde vieron una oportunidad de negocio.
Se acercaron para asociarse con Marcelo y Alejandro, e invitaron a Daniel Gómez Junco, para conformarse las tres sociedades que hoy integran Padel Club.
Durante esos meses, Diego consiguió la representación de Adidas Padel, Volt Padel y Cork Padel en el Norte de México.
Joven emprendedor
Antes de involucrarse en Padel, a Diego le gustaba participar en diversas actividades, lo que lo llevó a organizar Empredil, un congreso internacional de emprendimiento junto con otros estudiantes de diferentes colegios de la ciudad y que logró expandirse internacionalmente.
De estas experiencias, con tan solo 18 años, Diego escribió su primer libro “Me Subí al Tren”, publicado en marzo de 2017.
Además, lanzó un proyecto de unas barras de amaranto que tuvo un crecimiento importante en un año y medio, y que lo llevó a ganar el Marcia Israel Outstanding Student Award (USC Undergraduate Student Entrepreneur of the Year) en mayo de este año y que es otorgado a un alumno cada año que representa los ideales y valores que la universidad busca inspirar en los estudiantes.
¿Cuáles son tus planes a futuro?
“En enero comenzaré a trabajar en una casa de bolsa a tiempo completo y por las tardes estaré enfocándome en Padel Club. Mi idea a largo plazo es seguir haciendo lo mismo, porque quiero seguir envuelto en el deporte y al mismo tiempo trabajar en el mundo de las finanzas donde pueda desarrollarme como persona y profesional. Creo que trabajar en una casa de bolsa me ayudará a desarrollar mis habilidades de ventas y análisis mientras estoy al pendiente de lo que sucede en el mundo. Al final de cuentas, mi meta es poder hacer las cosas que más disfruto hacer y aprender de ellas cada día.”
Contacto
https://padelclub.mx/
FB: @PadelClubMty
Instagram: padelclub_
