Desde pequeño, Daniel Milmo, Co-director de Casa Madero, la vinícola más antigua de América, vivió la pasión por el vino gracias a su padre, quien lo incentivó a explorar todos sus procesos, desde las actividades en los viñedos de la Hacienda San Lorenzo, hasta colocar el producto en los anaqueles de los mejores distribuidores.
¿Cuántos años llevas a cargo de Casa Madero?
Empecé trabajando en los veranos desde chiquito en los viñedos y ya formalmente me incorporé en el 2000, empecé en los puestos de abajo y cuando muere mi papá en el 2010 mi hermano y yo asumimos la Dirección General, compartimos ese puesto.
¿Qué ha significado dentro de tu trayectoria en la compañía el haber experimentado los retos de todas las áreas involucradas en su operación, desde el viñedo hasta administración?
La verdad es que fue muy importante el haber trabajado desde chiquitos en los viñedos, la cosecha, el sistema de riego, la poda, en la bodega durante la vendimia y en todas esas diferentes áreas que involucran la elaboración del vino, en las que de alguna forma estuvimos mi hermano y yo por instrucciones de mi padre. Se lo agradezco mucho porque nos dejó una gran enseñanza y conocimiento sobre cómo se hacen esas cosas en la práctica, haber hecho uno mismo es diferente a que te digan cómo hacerlas.
¿Cómo has enfrentado junto con tu hermano la responsabilidad de estar al frente de una empresa que ha estado en su familia por más de un siglo?
Como vinícola Casa Madero tiene 422 años y con la familia Madero a partir de 1893. Afortunadamente mi hermano y yo hemos acordado las áreas de enfoque de cada uno de nosotros, de esa forma compartimos muy bien la dirección y administración. Siempre estamos muy involucrados en todas la áreas para buscar que se haga bien y todo con la mejor calidad posible.
¿Cómo enfrentan el reto de para conservar o superar esos atributos que distinguen sus productos al estar involucrados en el proceso factores naturales?
Para afrontar los factores naturales hemos estudiado las condiciones de suelo y clima que cada uno de nuestros valles y así definimos la vocación de variedad a cultivar de cada uno de nuestros lotes. Tenemos cinco estaciones meteorológicas en las diferentes áreas de nuestro viñedo para poder conocer sus necesidades y así poder abastecer el agua e insumos agrícolas necesarios para lograr la calidad de uva que buscamos.
En cuanto al tema de responsabilidad social, por favor platícanos sobre su labor con la casa hogar Quinta Manolita.
Esta casa hogar la fundó mi tatarabuela Manuela Farías hace más de 100 años, desde esa época Casa Madero, además de otros, ha sido el principal donante. Actualmente, tenemos cerca de 30 niños a quienes les damos hogar. Además, tenemos a 500 niños en escuela, se las proporcionamos prácticamente gratis con la cuota simbólica de 10 pesos al mes, ahí ofrecemos desde educación primaria hasta prepa. Esta es una labor de aportar algo a la sociedad dentro de la cual se encuentra Casa Madero, para regresar algo a los más vulnerables.
“Recientemente presentamos la etiqueta 1597, es una mezcla de Cabernet, Malbec, Petit Verdot y Shiraz, queremos que sea nuestro ícono. Quisimos darle al consumidor nuestra máxima expresión de calidad del viñedo. Tomó más de ocho años porque este trabajo se hace desde el viñedo y la calidad de las uvas, toma tiempo llegar a este tipo de productos”
Lo que tienes que saber de Casa Madero
- Es una empresa que tiene 125 años en su familia
- Con 420 es la vinícola más antigua de América
- En 2018 recibió cerca de 40 medallas
- Desde 1989 han recibido 870 medallas
- Es la vinícola mexicana más premiada
- Tiene 21 etiquetas de vinos jóvenes, Reserva, Gran Reserva y orgánicos