Por Gerardo Ortiz
Co-fundador y Business Designer del ecosistema de compañías creativas Camp.us, Brands&People, Novak Innovation, -1 y School of Change
IG: @ggoomm@holabrands@schoolofchangemx@novakinnovation
Nunca fui ‘morning person’ hasta que conocí la bici de ruta. Casi todas las mañanas antes de ser diseñador, soy ciclista escénico (de los que no compiten en las carreras, ni se miden el tiempo, pero se hipnotizan en cada kilómetro de montañas o desiertos), uno bastante promedio, debo confesar, ni particularmente bueno ni particularmente malo. La bici cambió la manera en cómo me siento física y emocionalmente durante el día: normal, o mal si no salgo. Con el doble de energía, concentrado y ligero si voy a la bici.
La primera vez que viví en Madrid compré una bici plegable para moverme por la ciudad. Cuando busqué información y mapas descubrí una dependencia de gobierno que se llama la Oficina de la Bici; según lo que me contaron ahí, ese espacio surgió por iniciativa de un organismo equivalente a la Secretaría de Salud en México.
Me emocionó su perspectiva sobre las cosas, para ellos la bici tiene que ver, primero con la salud de las personas, antes que la movilidad en la ciudad. Parece algo sencillo pero es un cambio de paradigma con verdadero potencial transformador. Es una forma muy distinta de abordar el tema, no se trata de que más personas se muevan en bici por la ciudad, sino que más personas cuiden su salud. Es distinto.
Tenemos la suerte de contar con dos ecosistemas increíbles como Chipinque y Huasteca dentro de la ciudad. Si lo pensamos un poco, estos dos parques son centros de salud holística con un potencial de mejorar el estado físico y emocional de muchas personas.
¿Qué pasaría si una parte de los presupuestos de salud se destinaran a potenciar, incentivar y conservar los espacios naturales? Se trata de ir cambiando poco a poco el pensamiento tradicional de observar un parque como un sitio únicamente ecológico o recreativo e imaginar el impacto desde otras ópticas como salud, espiritualidad o educación.
Hace dos años rediseñamos la imagen de Chipinque con un presupuesto limitado en comparación a una marca comercial; sin embargo, en el primer año después de su lanzamiento incrementaron sus visitantes en un 7%, atrayendo 40 mil visitantes más y los ascensos a cumbres se duplicaron de 3 mil a 6 mil en un año.
Esto se podría observar cómo impactó en turismo o recreación pero también en salud. Volviendo a las mañanas, cada vez que salgo a rodar con los Sherpas (así se llama el grupo de ciclistas con los que salgo entre semana) siento que me tomo unas microvacaciones sin salir de la ciudad.
¿Hace cuánto que no sales de microvacaciones?