Hasta Latinoamérica llegó el exitoso formato de ‘El Circo de las Pesadillas’, creado por una lagunera.
La actriz y productora Malena Zermeño se fue de Torreón para ser famosa, quería salir en la tele, estar en el medio, pero cuando lo probó no le gustó. Desde los 8 años estuvo en teatro y esa respuesta inmediata con el público era la que realmente la llenaba.
Viene una familia de dramaturgos, músicos, pianistas y concertistas, es bisnieta de la directora Consuelo González Garza quien la guió desde pequeña, pero no tuvo ningún privilegio, aprendió a respetar al público y al escenario, ha trabajado duro desde hace 17 años para llegar hasta donde está y marcar tendencia como la primera mexicana en montar un espectáculo de circo y drama con el ‘Circo del Miedo’, luego el ‘Circo de las Pesadillas’ en 2016, concepto que traspasó hasta Latinoamérica. En México estuvo en la gran Carpa Solary, tuvo temporada el Teatro Moliere. El formato de inmediato fue tomado por otros circos por la fusión de un espectáculo con estructura dramática.
Malena llegó a este punto luego de un duro transitar en televisión, como productora que claro le dejó aprendizaje, sabe lo que es la paciencia es básica cuando se quiere innovar pero al final tiene el resultado como el que ahora ve.
Tomó cursos de clown, de comedia, de actuación en general, pero sumirse en los libros y teorías no sirve de mucho, la práctica y el trabajo al final son los que renuevan las ideas.
“Puedes grabar toda una serie o telenovela desde un enfoque equivocado y lo sabrás mucho después, te dará experiencias para futuros papeles pero no para dar lo mejor de ti en un proyecto”.
La experiencia es muy distinta a como la gente lo imagina, son horas y horas de producción y solo actúas cinco minutos, a ella le gusta hacer actuar y en la tele no lo sentía, todo pasa muy rápido.
De la conducción por otro lado le fascina y la locución más, pero el teatro tiene una magia especial, todo lo que sucede es la primera la única y última vez, es la magia que algo tan repetido sea fresco para quien lo ve por primera vez, el espectáculo es lo que le gusta, mezclar cosas combinar artes hacer ‘teatro’, para la gente que no le gusta o que cree que ver a alguien gritando y llorando 3 horas y no, cree que es un nicho desatendido.
En México hay conciertos, musicales y teatro pero no un espectáculo como tal y si lo hay es muy poco, eso es lo que me gusta y me apasiona más que el teatro tradicional. Y cree que ahí radica el éxito del ‘Circo de las Pesadillas’, en el que se dio ese nicho a ese target, algo nuevo algo que no había que es un espectáculo con estructura dramática.
