Por Iván Carmona
Director Comercial Inmobiliario de 100 Ladrillos.
Las inversiones en bienes raíces han sido y seguirán siendo un medio para crear, crecer y proteger el patrimonio de las personas. Históricamente el comportamiento que han mostrado en términos de apreciación y rendimientos ha sido incremental por su larga duración (un inmueble bien construido dura más de 50 años), soporta los ciclos económicos y puede ser heredado.
Es común asociar la creación del patrimonio de una persona o familia con la adquisición de una casa. En primer término, esto es correcto, aunque típicamente la compra de una casa se hace para vivir en ella y eventualmente no se considera una inversión que genere rendimientos, pero sí creación del patrimonio.
Conforme aumenta la capacidad de ahorro de una persona, puede optar por la compra de un segundo inmueble, este último ya con fines de obtener un rendimiento que se traduce en la renta que recibe mes con mes, y a su vez, adquirir la plusvalía que va generando el inmueble con el paso del tiempo.
Aunque los beneficios de invertir en bienes raíces son contundentes, también ha sido un activo que no ha estado al alcance de todos, sin embargo, gracias al avance tecnológico de los últimos años, se han creado nuevas opciones que permiten el acceso a este tipo de activo a precios más accesibles.
Por ejemplo, las empresas de tecnología financiera (FINTECH) como
100ladrillos.com que al dividir una propiedad en 100 o más partes iguales hace más accesible tu compra, convirtiéndote en dueño de fracciones inmobiliarias con montos por debajo de $50,000 las cuales generan renta y plusvalía.
Es digno de celebrar que muchas personas puedan realizar inversiones en INMOfracciones de inmuebles accesibles y comiencen a vivir de sus rentas.