Ya ha trascendido a nivel internacional el documento citado por el diario Reforma y El Universal, en el que la Fiscalía General de la República acusa al expresidente Enrique Peña Nieto de cohecho, traición a la patria y delito electoral.
Fue este viernes cuando el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, descartó que vaya a detener una posible investigación contra su antecesor.
De acuerdo a las investigaciones, Peña Nieto habría jugado “un papel central” en el tema que involucra a la constructora brasileña Odebrecht.
Según esta orden de captura contra el exsecretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, Peña Nieto habría ordenado a sus asesores sobornar a los legisladores para que promulgaran reformas en beneficio de la mencionada empresa extranjera.
En el documento se detalla a Peña Nieto como alguien que gobernó “un Estado dentro de un Estado”, al emplear “su propio sistema de poder criminal” centrado en la distribución de sobornos.
Hasta el momento no hay orden de detención o similar contra el exgobernante, no obstante el partido Morena ha exigido que la Fiscalía lo llame a “rendir cuentas”.
“No, no puedo hacerlo (frenar la averiguación), tendría que llevarse a cabo la investigación y los jueces resolver si debe ser juzgado o puede ser juzgado en el marco legal vigente”, fueron los comentarios en rueda de prensa de López Obrador.
También añadió que él es partidario de que se consulte al pueblo en un referéndum en 2021, en el que se preguntará a los ciudadanos si están de acuerdo con que varios expresidentes sean enjuiciados por corrupción.
