Pocos tienen la fortuna de decir que han recorrido el camino de la vida cumpliendo todas sus metas, con la frente en alto, la convicción de llegar hasta el final y la ilusión del primer día. Don Germán González Navarro, empresario, ciudadano comprometido con las causas sociales y deportista modelo, hoy se distingue como un lagunero ejemplar.
Don Germán es el tercer hijo de José González y Esther Navarro, de quienes heredó las ganas de superarse y el ímpetu de lograr todo lo que se propone. Desde pequeño aprendió a trabajar arduamente, y después de estudiar Contabilidad en la Escuela Comercial Treviño, obtuvo su primer trabajo en una empresa de venta agrícola, Algodonera Mexicana Comercial, SA, la cual unos años después llegó a dirigir.
“Siempre fui bueno para trabajar y siempre he pensado que hay que entrenar tanto para trabajar como para amar. Cualquiera que sea la actividad a la que te dediques, hay que buscar la manera de enamorarnos de ella, a partir de ahí se puede ir brincando hacia mejores horizontes y podrás dejar huella”.
Reconocido en el mundo empresarial, Germán González se ha distinguido, además de su calidad humana, por su pasión y devoción al deporte. A partir de su jubilación en los 80, inició su carrera deportiva en el área del atletismo; enamorado de todo lo que hace, pronto destacó. “Me dediqué en cuerpo y alma a trabajar. Cuando renuncié a la Algodonera fue que me incliné por el deporte. El ejercicio es la base de la salud y la salud es uno de los cimientos de la felicidad”.
Hoy tiene en su memoria el recuerdo de cientos de proezas, pero sin duda una de las más notables es haber sido cofundador del Maratón Lala, una de las fiestas deportivas más importantes de la región y el país, evento en el que ha participado en más de 18 ocasiones, y que siempre lo finaliza entregando una rosa al amor de su vida, su esposa Chelito.
La historia del Maratón Lala se remonta a 1982, cuando Don Ramón Iriarte Maisterrena, el entonces Presidente el Consejo de Administración del Grupo Lala, inspirado en el nacimiento de otras carreras en Londres, París, DF, Guadalajara, Los Ángeles y sobre todo del Maratón de la Ciudad de México, tuvo la iniciativa de crear una carrera de 42 mil 190 metros en La Laguna. Para esto se apoyó en Alfredo Rojas Hernández, entonces funcionario del Grupo Lala y Don Germán González Navarro. Al proyecto además se unieron el Ingeniero Carlos González Garza y Esteban Méndez Hidrogo, que aportó su experiencia tras varios años de organizar el Medio Maratón Corrapor su Vida.
Conforme los años fueron avanzando, el Maratón pasó de ser una simple carrera a la competencia que hoy conocemos, gracias al apoyo de los miles de corredores laguneros, los extranjeros expertos, los patrocinadores, y por supuesto, los gritos, bailes y porras de los aficionados, pues las más de dos horas de recorrido son un espectáculo de alto nivel y una competencia que se apega lo más posible a los estándares mundiales, obteniendo gran prestigio entre los amantes del atletismo.
Bien dicen por ahí que los años no pasan cuando se cuenta con un espíritu incansable, a sus 85 años, Don Germán González ha participado en varias competencias nacionales e internacionales. A la fecha ha corrido en maratones celebrados en diversas ciudades del país y el extranjero, llegando incluso a correr 24 horas continuas y ganando más de 100 trofeos. En el 2004 fue portador de la antorcha olímpica; en el 2010 participo en Juegos Nacionales Deportivos y Culturales de los Adultos Mayores obteniendo la medallade oro en relevos de 400 metros y de bronceen 2800; en el 2011 obtuvo una presea de plata en los mismos juegos; desde el 2008 forma parte de la Calzada de los Deportistas Ilustres de la Unidad Deportiva Torreón; y ha dejado decenas de leyendas e historias inspiradas en sus logros.
Al hablar de Germán González es inevitable mencionar su fuerte compromiso hacia los más necesitados. Además de consolidarse como un deportista lleno de constancia, entereza y fortaleza, se ha caracterizado por su excelente calidad humana. Desde que inició su carrera deportiva pensó en una alternativa que pudiera unir sus dos grandes pasiones, por lo que creó varios maratones con fines benéficos como: “100 Kilómetros por amor a ti”, el cual recaudó fondos para del Centro Lagunero de Educación Especial, AC; y el súper maratón de 100 kilómetros “Oración por la paz del mundo”, que ayudó a la construcción del nuevo edificio del centro.
Seguro de que el hombre viene a este mundo a servir y que el amor al prójimo se demuestra a diario, Don Germán ha buscado la manera de apoyar diferentes causas sociales. Entre su amplia experiencia en la beneficencia destaca su gestión en los terrenos de diferentes escuelas como el Colegio Jesús María Echavarría, Colegio Los Ángeles, Centro Educativo Miguel Ángel, Escuela Secundaria Federal No. 3, Escuela de Bachilleres José María Morelos y Pavón, y la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro. Además fue parte primordial en la fundación de las asociaciones Vida Centro de Salud Mental y la de Invidentes de La Laguna Veamos por Ellos.
Como parte de los reconocimientos que la sociedad ha hecho a su incansable labor social, el Gobierno del Estado de Coahuila le otorgó la presea Mérito al Voluntario del Año 2003 y en septiembre de ese año el Ayuntamiento de Torreón le concedió la medalla de oro como Ciudadano Distinguido.
Un empresario ejemplar, un deportista comprometido, un amante del servicio social y un admirador de las mujeres, sin duda Germán González es un modelo de tenacidad, constancia y amor por los demás, un claro ejemplo de que la edad solo se siente en el corazón y que las metas se cumplen cuando se trabaja por ellas.
“A mí no me importa si soy bueno o malo, ni mis logros como empresario o deportista. Para mí lo más importante son esas bellas criaturas, las mujeres, porque después de Dios son lo más grande y hermoso de esta vida. Cuando yo me muera, prefiero que no recuerden mi nombre, pero que siempre tengan en mente mi respeto hacia las mujercitas”.
