El Complejo Ramos Arizpe de General Motors, por medio un comunicado de la Secretaría de Coahuila, anunció a principios del mes de septiembre la creación de mil 500 nuevas oportunidades de trabajo a un plazo de cinco meses, con el propósito de poner en marcha la fabricación de los nuevos modelos de autos eléctricos para inicios del 2023.
Aunque el propósito de emplear a tal cantidad de nuevos colaboradores continua en pie y con bolsa de trabajo abierta, la empresa se situó en un paro temporal de actividades que inició el 20 de agosto y contemplaba un periodo de cuatro semanas para retomar labores el 12 de septiembre, el cual se extendió al 21 de septiembre.
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Esta situación respondió a la falta de componentes deteniendo así operaciones, por lo cual la plantilla de tres mil 200 trabajadores tuvo un cese y regreso paulatino de actividades.
Por su parte, el secretario de Economía, Claudio Bres Garza, dio a conocer que los planes de emplear a futuro a trabajadores que colaboren en la línea de producción para el proyecto de autos eléctricos, representa una gran oportunidad para General Motors, por lo que, durante el periodo de paro técnico, se aprovecha para proporcionar capacitación a los operarios sobre los nuevos equipos y las líneas de producción para cada fase de ensamblaje e instalación que se planea arrancar el próximo 2023.
