La escultura “El Pájaro de Fuego” de Mathias Goeritz es un ícono de Guadalajara desde 1957 en Avenida Arcos. Tras su reciente renovación que recupera su color original rojo bermellón con printura antigraffiti, te contamos cómo surgió este proyecto en la colonia Jardines del Bosque, diseñada por Luis Barragán.
Fue Luis Barragán quien invitó a Mathias Goeritz para crear “El Pájaro de Fuego”. La intención fue hacer de esta obra la bienvenida a la colonia al norte del fraccionamiento. La escultura de estilo abstraccionista, mide 12.5 metros de altura por 15 metros de longitud.
Si bien su conservación era estable, tenía deterioro por mantenimiento inadecuado ante la aplicación de capas de pintura, que disminuyeron la apreciación de la textura de la cimbra original.
El pájaro amarillo que fue “ladrillo”
Aunque durante sus primeras décadas fue una variación de rojo, el arquitecto y artista Fernando González Gortázar fue quien eligió el color amarillo que por años distinguió a la obra.
En el documento “Proyecto de intervención para la escultura urbana de autoría Mathías Goeritz”, del Gobierno de Guadalajara y la Dirección de Obras Públicas, González Gortázar relató cómo se dio el cambio de rojo a amarillo.
En sus visitas para supervisar la construcción de la escultura y realizar pruebas de color, Goeritz aprobó el color “ladrillo” original, que fue aplicado directamente sobre la obra.
De acuerdo a Obras Públicas de Guadalajara, desde el 2019, ante el deterioro de la pintura amarilla, se detectó una capa del color original, así como más capas de diferentes tonalidades amarillas y capas de enlucido.
La historia marca que si bien Gortázar atestiguó el color original de la escultura cuando tenía 13 años de edad, durante la presidencia de Ignacio Vázquez Ceceña en el Colegio de Arquitectos de Jalisco, se tuvo autorización de Goeritz de modificar el color original al tener recursos para renovar la pintura.
Gortázar se comunicó con Goeritz para consultarle sobre el color a elegir, a lo que respondió: “Mi obra y la de Luis (Barragán) es naranja y amarilla. Píntala del color que quieres”. Así, con la autorización del autor, Gortazar eligió el color que detonaría que por años la escultura fuera conocida popularmente como el “Pájaro amarillo”.
¿Qué escultura hizo Mathias Goeritz?
El Pájaro de Fuego de Mathias Goeritz y el fraccionamiento Jardines del Bosque de autoría Luis Ramiro Barragán Morfín están identificados como Patrimonio Artístico del Estado como Zona de Protección denominada Área Típica y Bien Mueble.
Con una inversión de 8 millones de pesos, se realiza en 2023 la restauración de “El Pájaro de Fuego”. En esto se incluye adecuaciones al entorno con una plazoleta con ciclopuerto, una fuente, la reubicación de garza para llenado de pipas, rampa para personas con discapacidad, pavimentación de la avenida Arcos, bolardos, machuelos y la Caja de Agua.
- Goeritz hizo esta escultura pensando en que fuera un elemento lúdico para los niños y que ésta fuera interactiva con los vecinos.
- La escultura se considera un hito en el legado escultórico de la ciudad al ser de las primeras en acercar esta disciplina a la ciudadanía desde un ámbito urbano y funcional.
- El diseño de Goeritz en formato monumental fue de las primeras obras abstractas con esta magnitud, a diferencia de la estatuaria figurativa que entonces predominaba.
- La escultura originalmente tenía dimensiones más grandes, pero fueron reducidas al no caber por completo en la calle y la complejidad que implicaría su construcción e instalación.
- Tras acordarse el tamaño que hoy conocemos de El Pájaro de Fuego, la obra se instaló por bloques, con una base de hierro y cimbra en cada sección que garantizó la estabilidad de la escultura.
- El colado de la obra se hizo con revolvedora. Tal fue su perfección en su mezcla, supervisada por Hernán Petersen, que la escultura no necesitó ser enjarrada.
Jardines del Bosque: la nueva ventana de Guadalajara
- Ante el crecimiento de Guadalajara en 1927, el Poniente de la ciudad se posicionó como el nuevo espacio de desarrollo para fraccionamientos a raíz del éxito de la colonia Americana.
- En esta búsqueda de espacios, se optó por fraccionar la zona en donde figuraba la Hacienda de San Antonio y el entonces bosque de Santa Eduviges, propiedad de la familia Ruíz Galindo, que fueron las bases de lo que hoy es Jardines del Bosque.
- Los terrenos fueron vendidos a Francisco Javier Sauza y al consorcio capitalino Ingenieros Civiles Asociados, que a su vez hicieron la venta de los mismos.
- Para 1958, la colonia Jardines del Bosque ya ofertaba sus fincas en los medios de la ciudad.
- Con la instalación de El Pájaro de Fuego y al colindar con las vías del tren, éstas fueron bordeadas por un muro que después fueron modificadas ante las dimensiones de la escultura.
