PLAYERS_OF_LIFE_LOGO_22
abril 15, 2024

,

Así será la remodelación de Casa Mudéjar

Ubicada en el corazón de la ciudad, esta peculiar edificación será rescatada en menos de un año y bajo la supervisión del INAH

Por

La casa Mudéjar o Morisca es un edificio que data de 1907, ubicado en la calle Ildefonso Fuentes, entre Allende y Matamoros. Se trata de una casa emblemática, cuya singular arquitectura ha llamado la atención de cientos de personas, quienes ven en ella una mixtificación de corrientes artísticas cristianas-románticas, góticas, renacentistas y musulmanas de la época.

Durante años se ha buscado su rescate y mantenimiento para que permanezca de pie y pueda ser empleada y visitada por turistas o arquitectos. Este año el Instituto Municipal de Cultura y Educación anunció que será remodelada y se realizarán mejoras bajo la supervisión del Instituto Nacional de Antropología e Historia.

 

 

Diseñada por el doctor Alberto Álvarez García, la casa forma parte del Patrimonio Arquitectónico del Centro Histórico de Torreón. De acuerdo con declaraciones de Elías Agüero, titular del IMCE, “Se busca rescatar la fachada, los arcos globulares, los ventanales, las columnas, el piso y lo que sea parte de la arquitectura original; nos encontramos en la etapa de limpieza, contamos con la autorización del INAH. Estamos en sinergia con el Archivo Municipal y la comunidad árabe, para documentar todo lo referente a la Casa Mudéjar”.

En una primera etapa se trabajará en las instalaciones eléctricas, tuberías, plomería, entre otros. Dentro de las acciones, se considera un centro cultural enfocado a la literatura, mismo que podría llevar el nombre de la poetisa Enriqueta Ochoa. Se espera que la restauración concluya en un año.

Historia
Originario de Jalisco, el doctor Alberto Álvarez llegó a La Laguna y compró los terrenos para construir esta casa, inspirada en sus constantes viajes a Francia y España donde conoció mucho de la cultura árabe. La casa, edificada en un lote de 17 metros de frente por 33 de profundidad, destaca por sus ventanas con arcos ornamentados, las columnas de la entrada principal y los cristales de colores. En 1924 fallece el doctor Álvarez, pasando la casa a propiedad de José Ávila, quien por años la administró. Después la casa tuvo uso habitacional e incluso comercial, pero desde hace 40 años permanecía en abandono.

+DESTACADO