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marzo 29, 2024

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Sergio Vargas, ejemplo de talento y altruismo

Virtuoso del piano y además, ferviente creyente de perseguir los sueños, trabajar en ellos y nunca rendirse

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Sergio Vargas Escoruela es un joven talentoso que, además de enamorar los sentidos al interpretar en el piano, de forma magistral, las piezas musicales de grandes compositores clásicos, es un ejemplo de solidaridad.

La joven promesa musical de México, ha tocado en más de 30 conciertos en el país, incluyendo el gran escenario del Palacio de Bellas Artes, junto a la Orquesta Sinfónica Nacional.

Desde pequeño, vivió rodeado de diversas expresiones artísticas, pero fue gracias a su abuelo, quien también toca el piano, que tomó un verdadero gusto por este instrumento musical.

Es así como, a la edad de siete años y luego de pedirle a su mamá que lo inscribiera a clases de piano, llegó hasta Mariana Chabukiani, su actual maestra y quien logró sacar de él, lo mejor de si mismo.

Su disciplina en las clases de piano lo llevó a la edad de 11 años a tocar en el Palacio de Bellas Artes junto a la Orquesta Sinfónica Nacional, interpretando el concierto número ocho de Wolfgang Amadeus Mozart, bajo la dirección de Pablo González. Y a los 13 años, volvió a conquistar el recinto, interpretando el concierto número nueve de Mozart, bajo la dirección de Andrés Salado.

Otros de sus logros fueron tocar en el Conservatorio José Manuel Izquierdo en España en 2016, haber sido solista con la Filarmónica de la UNAM, la Filarmónica de Jalisco y en la Camerata de Caohuila. Y en 2018, llevarse el Premio Nacional de la Juventud, distinción entregada por el entonces presidente de México, Enrique Peña Nieto.

Estas grandes metas las conquistó gracias a su entrega, disciplina, amor y dedicación a la música clásica, la cual, asegura, lo hace sentir acogido. Es por esta razón que Sergio, confiesa que todos los compositores clásicos le gustan, pues cada uno le hacen sentir una sensación diferente al momento de tocar sus piezas. “Es como si te encerraras a un mundo imaginario donde está solo la música y tú, es una sensación indescriptible”, dijo el estudiante de secundaria.

Por otra parte, además de ser un virtuoso del piano, Sergio se caracteriza por ser una persona altruista, que busca apoyar desde su trinchera, a la sociedad, sobre todo a jóvenes y niños que comparten su gusto por la música clásica.

En 2018, Sergio crea la iniciativa “¡Inténtalo sin rendirte!”, cuyo objetivo es fomentar la música entre los niños y jóvenes mediante pláticas motivacionales y conciertos didácticos.

“Yo me daba cuenta que disfrutaba mucho de la música, entonces platiqué con mi papá y le dije que yo quería que otros niños y jóvenes también sintieran lo que yo sentía, entonces iniciamos esta campaña. Yo quiero acercar más a la gente a este mundo tan maravilloso”, dijo.

Y es que para la joven promesa, es importante que todos logren sus objetivos y no se rindan. “Sueña en grande, persigue tus sueños, inténtalo sin rendirte, porque con mucho trabajo y esfuerzo, los objetivos se pueden lograr”.

Este sentimiento de ayudar a los demás, se forjó desde su núcleo familiar, ya que, cuenta Sergio, siempre ha vivido en un ambiente solidario.

“En mi casa, nosotros reciclamos plásticos y los llevas a “Ver contigo”, que es una asociación para la gente con discapacidad visual o con problemas de la vista en general. También recolectamos las tapas para apoyar a los niños con cáncer. Es algo que nosotros hacemos como familia. La solidaridad es un valor que tenemos y difundimos”, comentó.

Es por esta dedicación de ayudar a los demás y por su gran talento en el piano, que Sergio fue nombrado Ciudadano Distinguido de Torreón, Coahuila. “Me sentí muy agradecido y muy honrado de que me hayan elegido como ciudadano distinguido, pero también es una gran responsabilidad porque tengo que dar el ejemplo a miles de personas; sin embargo, fue un aliciente para salir adelante”, dijo.

Sergio busca seguir trabajando, seguir mejorando, seguir aprendiendo, difundir la música y el arte entre los niños y jóvenes, aunque también seguirá haciendo otras actividades que le encantan, como cocinar postres, gusto heredado por su mamá; jugar ping pong con su papá y ver películas con la familia.

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