La experiencia de ser cuidadora principal de su mamá, quien padeció Alzheimer por 14 años, a Tere Villarreal de Dillon le dio una perspectiva muy puntal sobre esta enfermedad y durante los 11 años que ha ejercido el cargo de Presidenta de la Asociación Alzheimer Monterrey se ha enfocado en apoyar de familia a familia.
A través de los años han dado pasos importantes en la profesionalización de la Asociación al tener manuales de operación y han crecido tanto para afuera, como hacia adentro, “Es importante que hacia adentro tengamos una organización ordenada, que vivamos los valores que predicamos, como amor, amistad, empatía, solidaridad y respeto; también nos asesoramos en Recursos Humanos para ser muy eficientes y profesionales hacia el interior de la Asociación. Tengo la gran ilusión de lograr en todo el País que este modelo de trabajo se pueda compartir y multiplicar porque es tan importante estar educados, no estar solos en este proceso”, profundizó.
Por medio de esta entrevista, Villarreal de Dillon invita a no tener miedo a saber enfrentar si nos llega a tocar vivir de cerca esta enfermedad con algún familiar o bien, entender cuáles son las señales de alarma para estar prevenidos y saber que nadie está exento.
En Nuevo León el caso más temprano fue diagnosticado a los 35 años y también hay diagnósticos con personas entre 40 y 50 años, aunque a la mayoría se le detecta a partir de los 60 o 70 años, conforme la edad va avanzando, hay más incidencia por lo que enfatiza la importancia de que como sociedad estemos preparados.
Algunas de las señales de alarma son la pérdida de la memoria reciente, mientras que la memoria antigua permanece impecable; el no encontrar la palabra indicada para expresarse, dificultad para seguir instrucciones, desconocer la función de objetos y dificultad para ubicarse.
Si se detectan algunas de estas señales, Tere Villarreal de Dillon recomienda acudir con un geriatra, neurólogo o psiquiatra, quienes son los médicos especializados para hacer un diagnóstico de esta índole. “También ha habido mucha incidencia con la hipertensión y la diabetes, por lo que hay que cuidar nuestra salud porque estas enfermedades inflaman las neuronas del cerebro y con el tiempo pueden generar demencia”, agregó.
“Ha sido todo un esfuerzo y trabajo con el objetivo de sensibilizar a la familia y al cuidador principal de lo que es todo este proceso para lograr una atención digna, de respeto y calidad a nuestros enfermos. Aquí trabajamos en educar y capacitar a la familia para lograr una atención digna a nuestro enfermo”, compartió sobre la labor de esta asociación que opera desde hace 23 años.
La enfermedad no respeta clases sociales ni culturales, 6 de cada 10 adultos mayores de 80 años o más van a tener un tipo de demencia. Existen más de 60 tipos de demencia y el Alzheimer, enfermedad que dura de cinco a 20 años, es uno de ellos, que abarca cerca del 50 por ciento de los diagnósticos.
¿Cómo podemos evitarlo?
Durante la charla expresó que lo que le hace daño al corazón, afecta al cerebro, por lo que hay que cuidar la alimentación, activar nuestro cuerpo, dormir bien (entre seis y ocho horas), y en el caso de los jubilados tener una terapia ocupacional positiva y socializar, por mencionar algunas.
“En la Asociación cada vez tenemos retos más grandes porque tengo un sueño muy grande, lograr tener un centro de día donde todos los cuidadores que no tienen a dónde llevar a su enfermo para poder seguir trabajando, puedan llevarlo y además de atenderlos y brindar terapia ocupacional, dar terapia neuropsicológica, hacer buenas evaluaciones, y que se sientan parte de la sociedad. Luego, tener un asilo donde nuestros enfermos puedan morir dignamente”, concluyó.
